Dos jóvenes de Massacusetts (Estados Unidos) están siendo investigadas por haber encerrado a un bebé en una nevera, grabarlo con el móvil y difundirlo a través de la red social de vídeos efímeros Snapchat.
Todo ocurrió de tarde, con la madre en la casa, que se ausentó unos minutos para ducharse. En ese preciso momento, las dos jóvenes cogieron al bebé, lo sujetaron, abrieron la puerta del frigorífico y lo introdujeron sin ningún tipo de problema.
La pequeña comenzó a llorar desconsoladamente, algo que no frenó a sus agresoras, que continuaron grabando todo lo que ocurría con sus teléfonos móviles. Los llantos de la menor eran tan fuertes que incluso podían escucharse desde el exterior del electrodoméstico.
Posteriormente, y tras haber capturado todo lo que sucedía, las jóvenes sacaron al bebé y continuaron como si nada hubiera pasado. Las adolescentes continuaron riéndose durante todo el transcurso de los hechos.
Sin embargo, los usarios estallaron en cuanto contemplaron las imágenes y se pusieron en contacto con la Policía, que actuó inmediatamente.
Las niñeras fueorn detenidas y ahora se enfrentan ante la Justicia por los cargos de agresión y por haber puesto en peligro la vida de un menor. La madre de la pequeña, que había dejado a la menor a cargo de las adolescentes durante el breve período en le que iba a la ducha, está consternada.
El bebé se encuentra en perfecto estado.
