La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a Javier Rodrigo de Santos, exconcejal del PP de Palma, a dos años de cárcel por abusar sexualmente a un preso al que debía tutelar como coordinador de la ONG Horizontes Abiertos. El tribunal ha descartado la denuncia de un segundo preso al considerar que no ha quedado suficientemente probado.
Rodrigo de Santos tendrá prohibido acercarse a menos de 500 metros así como comunicarse por cualquier medio con Mohamed Y. M., su víctima, durante un periodo de cinco años a cumplir simultáneamente con la pena de prisión. En vía de responsabilidad civil, deberá abonar 3.000 euros en concepto de daño moral a la víctima.
La sentencia considera acreditado que Rodrigo de Santos aprovechó su condición de coordinador del programa de ayuda a los presos para obligar a uno de ellos a mantener con él relaciones sexuales no consentidas bajo la amenaza de informar en contra de su libertad a Instituciones Penitenciarias o incluso con regresarle a su país de origen.
Según recoge la sentencia, Rodrigo de Santos, bajo amenazas, arrastró a víctima a un aseo donde le realizó tocamientos de contenido sexual no consentido. También considera probado que el acusado, el 8 de noviembre de 2016, llevó al preso a su domicilio durante uno de los permisos concedidos . Allí, ambos estaban sentados en el sofá, cogió la mano de Mohammed, la llevó a su pene al mismo tiempo que tocaba con su mano el pene de él y le daba besos en la cara y en el cuello.
Este recluso aportó a la causa los mensajes de WhatsApp en los que Rodrigo de Santos le hacía todo tipo de proposiciones. El condenado ha reconocido las conversaciones y que el recluso estuvo en su casa, pero lo sitúa todo en un contexto de mutua "provocación e insinuación". Para los jueces, el intercambio "execede lo que podría entenderse como un juego", porque Rodrigo de Santos le dice hasta en 13 ocasiones "te quiero" y le invita cuatro veces a su cama.
Prostitución masculina y abuso sexual de menores
Era una de las figuras más prometedoras del PP balear, pero ha acabado protagonizando varios escándalos de abusos sexuales. Casado y con cinco hijos, fue teniente de alcalde del Ayuntamiento de Palma y concejal de Urbanismo. Perteneciente al Camino Neocatecumenal, los kikos, se negó a celebrar matrimonios entre personas del mismo sexo, lo que hizo más sonoro el escándalo.
En 2008 se destapó que usó dinero público, 50.000 euros concretamente, para gastos en prostitución masculina. Varias grabaciones además le mostraban desnudo en el club consumiendo grandes cantidades de cocaína. Fue condenado a dos años de cárcel por malversación de fondos y fue expulsado del PP.
Más grave fue el caso de 2010, cuando fue condenado a 13 años y medio de cárcel por la Audiencia de Palma por abusar sexualmente de dos menores, amigos de sus hijos, a los que tutelaba en un grupo de catequesis. El Tribunal Supremo rebajó a cinco años la pena al considerar que no quedaba claro si el menor de 14 años con el que mantuvo relaciones había dado o no su consentimiento.
