Después de meses escuchando hablar sobre los 'casoplones' de algunos políticos, llega el turno del portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique. Hace dos años abandonó el barrio de Salamanca de Madrid y ahora continua instalado en el barrio de Valverde, de tradición obrera, situado en el distrito de Fuencarral-El Pardo, al norte de la capital. Una casa muy diferente a los casoplones de Casado, Abascal o Inés Arrimadas.
Pablo Echenique ocupa el bajo de un edificio de tres plantas, en una vivienda que eligió porque está reformada para sus problemas de movilidad. De hecho, el portal está reformado para que pueda utilizar la entrada, ampliando el portón y cimentando una rampa para facilitar su acceso con la silla, señala el diario La Razón.
Todos los vecinos de Echenique viven de alquiler, al igual que el portavoz de la formación morada, que actualmente forma parte del Gobierno de España. El bajo en el que vive Echenique cuenta con un salón, cocina, baño y habitación. Por esta casa paga entre 600 y 700 euros al mes, según los pisos de las mismas características de la zona. La vivienda de Pablo Echenique tiene 63 metros cuadrados.
Echenique, aunque no hace gran vida en el barrio, sí que frecuenta el entorno. Acude a un bar cercano junto a su mujer para tomar el vermú de vez en cuando, sobre todo los fines de semana a la hora del aperitivo. No acude con frecuencia, eso sí, ni a la frutería o a la peluquería, tampoco a la farmacia; ya que hay grandes dificultades de acceso por la silla de ruedas, como reconocen los comerciantes. El problema se encuentra en las aceras, que son muy estrechas y tienen forma irregular.
La anécdota con los mecánicos de un taller cercano
Mención aparte merece su anécdota con los mecánicos de un taller cercano a su vivienda, según relata el citado medio. Cuentan que le ven cada mañana mientras espera a su escolta, que le recoge en una furgoneta de color negro. Pero lo grande viene ahora.
Lo más llamativo es que, en alguna que otra ocasión, ha hecho el amago de entrar en el taller en silla de ruedas. Cada vez que pasa por el taller, se ofrece a los mecánicos y suele hacer el ofrecimiento para que le reparen. Todos coinciden en decir que "el argentino parece buena gente".
El dirigente de Podemos sigue haciendo su vida en esta vivienda del área de Tres Olivos, en el norte de Madrid capital, lejos del barrio de Salamanca, donde vivía hace dos años. También muy lejos del centro de Madrid. Suponemos, buscando también algo más de tranquilidad.