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Donald Trump ocultó que dió positivo en coronavirus tres días antes del debate electoral con Biden

Mark Meadows, exjefe de gabinete de Donald Trump, ha publicado un libro donde revela detalles sobre su gestión de la pandemia.

Donald Trump ocultó que dió positivo en coronavirus tres días antes del debate electoral con Biden

Donald Trump dió positivo por Covid-19 tres días antes de la celebración del debate electoral con Joe Biden, al que se presentó sin mascarilla y con una PCR de resultado negativo que era falsa.

Así lo ha confirmado el que fue el exjefe de su gabinete, Mark Meadows, en un libro del que el periódico The Guardian ha publicado algunos fragmentos. En ellos Meadows afirma que el expresidente sabía que tenía que dar negativo 72 horas antes del debate, pero que aun así "nada le iba a impedir acudir ".

De esta forma los dos candidatos tenían que presentar una prueba PCR negativa que se hubiera realizado 72 horas antes del debate electoral. Marc Meadows señala que Trump no tuvo ningún problema en presentar una prueba negativa que era falsa y que habían hecho con posterioridad en un test diferente.

Los rumores acerca de que el entonces presidente acudió siendo positivo fueron un tema constante durante esos días, sobre todo porque Trump presentaba varios síntomas durante ese tiempo. "Se le veía cansado y un poco resfriado", explica Meadows.

Lo cierto es que la Casa Blanca anunció que Trump había dado positivo en coronavirus justo días después de haberse celebrado el debate, el 2 de octubre, motivo por el que tuvo que ser hospitalizado. Posteriormente Trump quiso mostrar a la prensa que se encontraba perfectamente dando un paseo por los alrededores del hospital.

Trump lo niega

Tras las declaraciones de Marc Meadows, Trump ha lanzado un comunicado por el que ha negado estas declaraciones, acusando a su exjefe de gabinete de mentir, de ser un germófobo, y de estar obsesionado con la Covid-19.

Además, en el comunicado Trump afirma que el resultado positivo después del debate fue un shock para toda la Casa Blanca, quienes en ese momento se encontraban organizado un evento para la entonces candidata al Tribunal Supremo Amy Coney Barrett que ahora sería considerado de alta transmisión.

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