Donald Trump ha vivido estos días su semana más complicada desde que aterrizó en la Casa Blanca, asediado por las críticas tras no condenar con contundencia a neonazis y supremacistas tras las manifestaciones en Charlottesville que acabaron con una joven asesinada por un neonazi.
El atentado de este jueves en Barcelona, que a priori ha sido reivindicado por ISIS, ha ofrecido al Presidente Americano una vía de escape. Trump se mueve como pez en el agua con el terrorismo islámico y lo ha utilizado en más de una ocasión a beneficio propio.
Trump primero ha publicado un tweet estándar de repulsa en el que aseguraba que "Los Estados Unidos condenan el ataque terrorista en Barcelona, España, y harán lo que sea necesario para ayudar. Sed fuertes, ¡os queremos".
Pero, 45 minutos después, Trump ha vuelto a hacer de las suyas, pidiendo a sus 36 millones de seguidores que "estudien lo que el General Pershing de los Estados Unidos hizo a los terroristas cuando los capturó. ¡No hubo más terror radical islamista en 35 años!"
Trump aprovecha el atentado de Barcelona para citar una leyenda
El General Pershing al que Trump se refiere en su tweet es es Joseph "Black Jack" Pershing, uno de los generales que Estados Unidos puso a cargo de Filipinas tras arrebatarle el archipiélago precisamente a España a comienzos del Siglo XX.
Pershing fue Gobernador de la Provincia de Moro, de mayoría islámica, entre 1909 y 1913. La leyenda a la que Trump se refiere la explicó él mismo en uno de sus discursos preelectorales en 2016:
"Tenían problemas con el terrorismo, como nosotros. Y capturaron a 50 terroristas que hicieron un gran daño y mataron a mucha gente. Y entonces cogió a los 50 terroristas, y mojó 50 balas en sangre de cerdo. Cargó a 50 hombres con sus rifles y mataron a 49 de los terroristas. Al último le dijo: 'vuelve con tu gente, y diles lo que ha sucedido'. Y durante 25 años no tuvieron ningún problema más. Veinticinco años sin problemas".
Obviando el detalle de que la primera vez que habló del asunto mencionó 25 años y ahora ha añadido 10 más, lo cierto es que multitud de historiadores analizaron las declaraciones de Trump, para constatar que no es más que una leyenda.
Primero porque aunque los musulmanes no coman cerdo, nada dice la doctrina musulmana sobre el asesinato con sangre de cerdo, ni que esto supusiera nada para el alma de las personas. La sangre de cerdo tampoco produce ninguna reacción especial en el cuerpo de los musulmanes.
Y segundo porque, básicamente, todo lo que cuenta Trump es inventado. La leyenda tiene al parecer origen en una película de Gary Cooper de 1939 y desde entonces ha sido desmentida por multitud de historias.
Es más, en unas memorias el propio Pershing reconocía que otro general le había contado que una vez vio como enterraban a un grupo de musulmanes con un cerdo, siendo esta la única evidencia que da pie a la leyenda. Por supuesto, no tuvieron 25 años sin problema en la zona, y Pershing sólo duró cuatro como Gobernador de la región.