Génova 13 tiene los días contados. Al menos como sede nacional del Partido Popular. Así lo ha anunciado Pablo Casado, líder de la formación, como golpe de efecto tras los terribles resultados cosechados en las elecciones de Cataluña. Los conservadores continúan encadenando fracasos en las urnas, a lo que tampoco ha ayudado el juicio a la caja B que también afecta a su sede en Madrid.
Casado pretende romper con el pasado, por lo que ha avanzado que el PP "no va a dar más explicaciones que correspondan al pasado y conductas individuales". "No nos lo podemos permitir más con el calendario judicial que se avecina. El coste electoral es tremendo y tenemos que dejar de preocuparnos por nuestro pasado y ocuparnos del futuro", reconoció ante el comité ejecutivo de su partido.
Siendo Génova un símbolo indiscutible del Partido Popular, pero también de la parte más oscura y corrupta de la formación. "Las hipotecas en política no son hereditarias y no podemos seguir pagando facturas de cuestiones que ni conocemos", explicó, para anunciar que cambiarán de sede nacional "porque no debemos seguir en un edificio cuya reforma se está investigando en los tribunales". Y es que la justicia investiga si se utilizó dinero negro para la reforma de la sede nacional del PP.
Pese a que el gesto no deja de ser simbólico y no soluciona los problemas que han llevado al PP a sumar derrotas electorales, los de Pablo Casado ahora tienen que valorar qué hacer con Génova 13. El líder del partido no avanzó cuándo llevarían a cabo la mudanza ni dónde situarán la nueva sede, pero está claro que algo tienen que hacer con la que dejan atrás.
Las opciones para Génova
Hay que tener en cuenta que Génova consta de 6.800 metros cuadrados de oficinas y más de 3.400 metros cuadrados de aparcamiento, haciendo un total de 10.200 metros cuadrados distribuidos en nueve plantas de oficinas y cuatro de aparcamiento. Además, goza de una situación estratégica en una de las zonas de negocios más cotizadas de la capital.
Sabiendo esto, si el PP decide vender su sede, podría ofertar por una horquilla de entre 40 y 46 millones de euros, según los cálculos de Fotocasa para El Plural. El portal inmobiliario especifica que que el precio de las oficinas en esta zona está cerca de los 5.000 euros/m2 para las oficinas y los 3.000 euros/m2 para los aparcamientos.
Si los populares logran vender Génova por 46 millones de euros, podría servirles como liquidez a sus cuentas. Además, recuperarían la inversión que realizaron en 2007 cuando compraron el inmueble a la aseguradora Mapfre por 37 millones de euros.
Pero vender no es la única opción. Los conservadores podrían destinar la sede al alquiler, con el precio de las oficinas entre los 140.000 y 150.000 euros y las plazas de aparcamiento por unos 17.000 euros.
No obstante, desde Fotocasa advierten que no es el mejor momento para este tipo de operaciones debido a la crisis del coronavirus y los cambios que han acarreado en el entorno laboral como la implantación del teletrabajo. "Probablemente no sea el mejor momento para sacar rédito de una operación de estas características en materia de alquiler", señala Anaïs López, directora de Comunicación del portal.