El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, continúa enfrentando una fuerte polémica por su comida con la periodista Maribel Vilaplana en el restaurante El Ventorro. Un encuentro que se alargó durante más de dos horas en plena catástrofe, sin que los avisos de emergencia llegaran a la población (la riada sorprendió a muchos en garajes) y por la que el presidente llegó tarde al encuentro en el Cecopi para gestionar la alerta.
La comida de Mazón y Vilaplana en El Ventorro ascendió a alrededor de 160 euros, a razón de dos menús cerrados de 75 euros cada uno. Esta es la revelación que ha lanzado la vicepresidenta del diario El Español, Cruz Sánchez De Lara, en el programa 'Espejo Público'. Además, ha afirmado que el departamento de Presidencia no quiere hacer pública la factura del gasto al defender que "no tiene importancia".
Durante una comparecencia pública, Carlos Mazón aseguró que no tenía ningún problema en mostrar la factura sobre el gasto que realizó en El Ventorro. En todo caso, no consideró que la comida fuera un asunto de relevancia pública y afirmó que se había realizado en calidad de presidente del PP de la Comunidad Valenciana y no como presidente de la Generalitat.
Este dato sorprende, puesto que Carlos Mazón llegó a afirmar que el encuentro tenía como objetivo ofrecer a la periodista la presidencia de la televisión pública autonómica, Á Punt, que depende de la Administración autonómica. Pero no es la primera contradicción, puesto que inicialmente llegó a negar ningún encuentro, después afirmó que se había reunido con empresarios aunque no aparecía nada en su agenda y finalmente tuvo que reconocer que había comido con la periodista.
El presidente valenciano ha afirmado que la publicación oficial de las facturas sobre la comida que mantuvo en plena DANA de Valencia continuará con los trámites y plazos y que "con absoluta transparencia se depositará ante el Tribunal de Cuentas", aunque por el momento no hay constancia de datos al respecto.
"Insignificante"
A pesar de las grandes críticas que está recibiendo el presidente valenciano por su comida durante la DANA, que le han llevado a ser increpado por las calles de Valencia ante la controvertida gestión de una alerta sobre la que previamente había avisado la Aemet, Mazón ha recibido apoyos dentro de su partido.
Especialmente relevante ha sido el respaldo de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, que ha afirmado que la situación generada por la DANA es lo "suficientemente dura" y de una "magnitud enorme" como para exigir responsabilidades dando vueltas a cuestiones "intrascendentes" o "insignificantes" como el ticket de una comida.
También ha sido relevante el apoyo que Mazón ha recibido desde la cúpula del PP. El presidente del partido, Alberto Núñez Feijóo, ha descargado toda la responsabilidad de la gestión de la catástrofe sobre el Gobierno central, a pesar de que las competencias eran plenamente autonómicas, y ha llegado a afirmar que Mazón "era el que menos responsabilidades tenía".
Como nunca se declaró el nivel 3 de alerta (máximo), la ley señala que la comunidad autónoma como máximo representante del Estado en un territorio tendrá el mando y el Gobierno central proveerá los medios necesarios, y por tanto vulnerar esta cuestión competencial implicaría un caso de prevaricación.
227 muertos
La DANA de Valencia dejó 227 víctimas mortales. De ellas, 219 se produjeron en la Comunidad Valenciana, 7 en Castilla-La Mancha y 1 en Andalucía. En Valencia, los avisos del sistema ES-Alert no llegaron a los teléfonos de los ciudadanos hasta las 20:11 horas, cuando las inundaciones ya eran una realidad y muchos ciudadanos se vieron sorprendidos por la riada, por ejemplo, intentando recuperar su coche en el garaje o visitando centros comerciales.
Este aviso tardío pudo ser determinante para el elevado número de muertes en esta catástrofe y sorprende porque la Agencia Estatal de Metereología (Aemet) ya había enviado avisos por al alerta metereológico durante toda la jornada.