Siempre hemos tenido la eterna duda acerca de lo bueno que puede ser ingerir aguacate en nuestra dieta diaria. ¿Engorda o no? ¿Podemos comerlo cada día sin añadir innecesarias calorías que motiven un aumento de peso en nuestro organismo?
La creencia popular en torno a los aportes nutritivos de este alimento siempre han estado cerca de pensar que si lo comemos no estamos haciendo ningún favor a nuestro cuerpo. Sin embargo, a diferencia de la sabiduría popular, sus grasas son cardiosaludables y, por tanto, lo suficientemente buenas para ayudar a reducir los niveles del "colesterol malo", conocido científicamente en inglés como LDL (Lipoproteínas de Baja Densidad) en personas riesgo.
Además de su composición natural, la ingesta de aguacates está relacionada directamente con el consumo de cualquier tipo de alimento o bebida y su relación con el cómputo de calorías que sumamos al final del día. Es decir, si queremos perder peso habrá que situarse en un déficit calórico, lo que significa ingerir menos calorías de las que nuestro cuerpo necesita, añadiendo ejercicio físico y alimentos saludables.
El aguacate es uno de ellos y aunque su aporte calórico por unidad se sitúe en torno a los 250 kilocalorías, las grasas que aporta a nuestro organismo son mucho más saludables que las que obtendríamos de la carne. Incluso si lo utilizamos para reemplazar los hidratos de carbono, no solo estaríamos ayudando a nuestro cuerpo a no ganar kilos extra, sino que incluso los perderíamos. Por lo tanto, los nutricionistas sí recomiendan comer este alimento, aunque como con todo, con moderación.
Deberían hacerlo especialmente las personas que cuentan con LDL en las paredes de sus arterias. Un estudio publicado en el Journal of Nutrition, realizado por la Universidad Estatal de Pennsilvania (EEUU), ha determinado que la toma diaria de aguacate motiva el descenso de colesterol malo. Lo que las "partículas LDL pequeñas y densas" crean en nuestro sistema cardiovascular es muy perjudicial para nuestra salud y podrían ser el claro desencadenante de un infarto, ya que obstaculizan el flujo sanguíneo. "Las personas en riesgo podrían plantearse el añadir el aguacate como alternativa saludable, por ejemplo como tostadas de pan de grano entero o como pasta para mojar verduras crudas".
Previene la oxidación, perjudicial para el organismo
La oxidación es uno de los procesos que juegan en contra del organismo. Al igual que ocurre con las manzanas o las patatas cuando las pelamos, nuestro cuerpo también reacciona a este fenómeno cuando se eliminan las partículas LDL por la dieta empleada en el trabajo. El proceso de oxidación, por tanto, no es saludable y muchos estudios, en palabras de la profesora Penny Kris-Etherton, señalan que podría ser "la base de enfermedades como el cáncer y las dolencias cardiovasculares". El aguacate, como antioxidante, nos lleva a combatirlo.
"Cuando las partículas de LDL se oxidan, arranca una reacción en cadena que puede dar lugar a la aterosclerosis o acumulación de placa arterial. Si puedes protegerte de la oxidación mediante las comidas que tomas, es un beneficio a tener en cuenta".
De hecho, 45 personas adultas con sobrepeso y obesidad se sometieron a una dieta que ayudó a los investigadores a obtener las conclusiones mencionadas. Para ello, estuvieron dos semanas bajo la denominada dieta occidental, la que los estadounidenses hacen en su día a día. No es que sea muy buena, al menos ese es el rumor que corre en Europa, pero tenían que hacerlo para poder ser separados en tres grupos, partiendo de la misma base. Después, todos ellos siguieron hábitos alimenticios distintos, ingiriendo comida baja en grasas, otras algo más grasas y otra mismamente grasa que incluyera el consumo de un aguacate diario. Los del segundo grupo, al tener que incluír en su ingesta alimentos con grasas, tuvieron que ingerir suplementos nutricionales para equilibrar en su organismo el aporte de saludables ácidos grasos monoinsaturados presentes en el aguacate.
Las comprobaciones se hicieron efectivas transcurrido ese tiempo. Todos lo que formaron parte del tercer grupo presentaban niveles de colesterol mucho más bajos que el resto de individuos que conformaban los otros dos grupos restantes. Además, aumentaron también sus niveles de luteína. "Puede ser el factor bioactivo que proteja al colesterol de la oxidación", plantea la profesora.
"La investigación nutricional sobre los aguacates es un área relativamente nueva de estudio, y creo que estamos en la punta del iceberg de cuánto podemos saber de sus beneficios para la salud", reflexiona la experta, describiéndolos como "muy ricos en grasas saludables" y ayudan a mantener en perfecto estado nuestra salud ocular. Sin embargo, la profesora hace balance por ser "una área relativamente nueva de estudio" y es prudente: "Nos queda mucho por aprender".