Los menús de pizza durante más de dos meses para los niños más vulnerables de la región. Sus fotografías al modo 'Mater dolorosa' en plena pandemia. Su "desafortunada aclaración sobre el significado de la 'D' de Covi. "El irresponsable acto de cierre de IFEMA". Estos son solo algunos de los motivos por los que el diario francés Libération ha publicado este artículo criticando duramente el papel de Isabel Díaz Ayuso en la actual pandemia.
El medio asegura que el papel de Ayuso en la política se encuentra en franco declive, especialmente por su aportación en una crisis como la actual: "La líder madrileña ahora atrae tantas críticas que ha dejado de ser un activo de la derecha y se ha convertido en un elemento problemático, perdiendo el control de su discurso sobre la actual crisis sanitaria", afirma.
El artículo critica que Díaz Ayuso "encadena declaraciones vehementes contradictorias o surrealistas sobre el manejo de la epidemia" y que "su autonomía sigue siendo la más afectada, con el 29% de contagios y el 33% de las muertes nacionales".
Tampoco falta la mención a los escándalos de la presidenta, en torno a su alojamiento en un apartahotel de lujo propiedad de un conocido empresario de la capital: "Ayuso compensa su encierro en su apartamento de lujo en la Plaza de España con su hiperactividad en Twitter, en la radio o en televisión, donde sus declaraciones a menudo son desconcertantes".
"Un día defiende la pizza para niños y al otro que el coronavirus se cura con techos altos"
Y, en este sentido, destaca: "Un día defiende los menús de pizza para niños vulnerables; otro dice que en un hospital con techos altos el coronavirus se cura más fácilmente; al día siguiente de repente deja una reunión para ir a misa; o al comienzo de la semana asegura rotunda que la 'D' de 'COVID' corresponde a 'Diciembre', el mes en que el virus llegó a España", recoge el medio francés.
El medio recoge una mezcla de incredulidad y asombro con las constantes polémicas que protagoniza Isabel Díaz Ayuso con sus constantes apariciones en los medios de comunicación. Hasta el punto de asegurar que se trata de un "elemento problemático" que perjudica a las siglas de su partido, a pesar de los esfuerzos de Pablo Casado por "alabrar su gestión".
