La Dirección General de Tráfico (DGT) ha anunciado una nueva normativa que dificultará la renovación del carné de conducir a determinados conductores bajo tratamientos médicos que puedan afectar a su capacidad ante el volante.
Se trata de una medida diseñada con el objetivo de garantizar la seguridad vial de todos los conductores, así como reducir los accidentes de tráfico y garantizar que todos los conductores se sitúan en condiciones óptimas para manejar un vehículo.
La actualización establece que los conductores que vean alterada su capacidad visual, de atención o reacción no tendrán opción de renovar su carné de conducir. La DGT destaca que la responsabilidad de transmitir cualquier tratamiento está en manos de los conductores.
Tratamientos que impiden renovar el carné de conducir
Los medicamentos señalados por afectar a la conducción incluyen los ansiolíticos y antidepresivos, que pueden provocar somnolencia y disminuir los reflejos de los conductores, aumentando de este modo el riesgo de accidente.
Además, también se incluyen los antihistamínicos, utilizados en el tratamiento de alergias, que también pueden causar somnolencia y retrasar el tiempo de reacción al volante. También están incluidos los opiáceos y otros analgésicos fuertes, al afectar a la concentración y reflejos, junto con la insulina en los diabéticos, que podría llevar a una bajada de azúcar con efectos de confusión o mareos.
El incumplimiento de esta norma conlleva serias consecuencias. Si un conductor oculta información sobre su estado de salud o uso de medicamentos prohibidos, podría enfrentarse a sanciones económicas, retirada del carné o cargos penales en caso de accidente, recuerda la DGT.
También hay que destacar que si el conductor sufre un accidente, las coberturas del seguro podrían llegar a anularse, de modo que el conductor se vería sin respaldo financiero para hacer frente a los daños ocasionados.
De este modo, la DGT quiere reforzar la seguridad en las carreteras en España, asegurando que solo aquellos conductores en condiciones plenas de manejar un vehículo mantengan su licencia y se responsabilicen de su propio estado de salud al volante.