La Dirección General de Tráfico alerta sobre las numerosas irregularidades a las que se pueden enfrentar los conductores al volante, para que sean conscientes y eviten llegara tal extremo. Hay ocasiones en las que prestamos atención a algunos aspectos como el nivel de aceite, la presión de los neumáticos o el buen funcionamiento de las luces.
Sin embargo, desatendemos otros importantes que, además, siempre hay que tener en cuenta. Hablamos de la parte administrativa, ya que es mucho más importante de lo que pensamos 'a priori' y puede acarrear algún que otro problema a la hora de enfrentar una sanción.
De manera frecuente, se recomienda comprobar que llevamos todos los papeles en regla, toda la documentación obligatoria si nos la piden los agentes en cualquier tipo de control. No llevarla con nosotros supone importantes sanciones económicas y, en algunos casos, hasta la pérdida de puntos en el carné de conducir.
Los cuatro documentos que son imprescindibles
La DGT recuerda que la documentación obligatoria en el coche "constituye la garantía de que cumplimos la ley y las normas necesarias para circular con seguridad y serán lo primero que nos pedirán agente si nos para o nos vemos involucrados en un accidente".
En concreto, la Ley de Tráfico recoge el listado de documentos que tenemos que llevar en el coche: permiso o licencia de conducir, permiso del vehículo y tarjeta de inspección técnica. Además, desde 2008, también es obligatorio llevar el seguro del coche.
Para cada uno de los cuatro existen unas normas diferentes que indican la sanción por no llevarlo con nosotros, así como otras por datos incorrectos o permisos que no estén en vigor. En primer lugar, la multa por no llevar el permiso de conducción es de 10 euros, una cantidad que puede aumentar hasta los 80 en caso de que no esté actualizado o haya datos incorrectos.
Además, si está caducado, la sanción sube hasta los 200 euros. Si el conductor circula cuando le han retirado el carnet, se enfrenta hasta los 500 euros de multa, una cifra a la que se suma la pérdida de 4 puntos del carnet de conducir.
En cuanto a la inspección técnica, si no se lleva en el vehículo, la multa es de 10 euros. Debido a su estrecha relación con la ITV, si estuviera caducada, la cifra a pagar sería de 200 euros. Con el permiso de circulación, también se deben abonar 10 euros en caso de no llevarlo encima cuando se le solicite. En caso de que se circule sin tener el permiso en vigor, es decir, sin autorización para circular, la multa sube hasta los 500 euros.
En cuanto al seguro del coche, no es obligatorio llevarlo encima como tal, pero el agente sí puede comprobar si los datos se encuentran en vigor. Si el vehículo carece de seguro, ese enfrenta a una multa variable que va desde los 600 a los 3.000 euros en función de varias características como la categoría del vehículo, el servicio que preste o el tiempo que lleve sin estar asegurado.
