El uso correcto de bolas de remolque es fundamental para evitar multas. Por este motivo, se debe conocer su uso, instalación y obligaciones legales relacionadas. Si no cumplimos con las normas establecidas al respecto, podemos enfrentar una sanción que podría ascender hasta los 400 euros.
Cabe tener en cuenta que el uso de bolas de remolque tiene que contar con la debida homologación. Deben instalarse de forma concreta y cualquier modificación que se vaya a realizar tiene que ser verificada.
Además, se debe acudir a un taller especializado para confirmar cuál es la bola adecuada para nuestro modelo de coche, ya que no todas son siempre compatibles en todos los casos. Existen dos tipos habituales: fijas o extraíbles y, en función de ello, actuará el experto.
Por otro lado, debemos informar a la compañía de seguros de esta modificación en el vehículo, ya que si no cumplimos con este paso, podría resultar en la negación de la cobertura en caso de accidente, al no haber notificado la modificación.
Multas
No se obliga a los conductores a retirar la bola de remolque en el caso de que no se esté empleando, pero tampoco es necesario acudir a la ITV para su instalación. En todo caso, existen ciertos escenarios que pueden derivar en multas, como informa la Dirección General de Tráfico (DGT).
- Poca visibilidad de la matrícula posterior: Si no permite identificar el vehículo, se considera una sanción grave e implica una multa de 200 euros.
- Obstrucción de dispositivos de alumbrado o señalización: Si la carga transportada o accesorios ocultan los dispositivos de alumbrado o señalización, también se contempla multa.
- Incumplimiento de la ITV: Si no se ha pasado la ITV reglamentaria, se contempla una infracción por reforma de importancia no aprobada con una multa de 500 euros.
- Instalación no homologada: No instalar una bola de remolque homologada conforme a la normativa europea o hacerlo en un taller no certificado también puede derivar en una sanción económica.
La ITV revisará que la instalación de las bolas de remolque se hayan realizado en talleres autorizados y que estén homologadas. Si no sucede, la multa podría ascender hasta los 400 euros. Además, la DGT informa que se debe añadir un finroem de conformidad y certificado de instalación del taller.
