Este viernes por la mañana ha sido detenido Miguel Bernard, el secretario general de Manos Limpias así como al presidente de Ausbanc, Luis Pineda. La Unidad de Delincuencia Economíca y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional ha desplegado la denominada operación Nelson contra toda la cúpula del sindicato en un total de siete operaciones por delitos de extorsión, organización criminal, falsedad documental, fraude contra la hacienda pública y en subvenciones. En las operaciones también han sido detenidas la mujer de Pineda y su secretaria.
El sindicato Manos Limpias está siendo investigado en los últimos días por una presunta trama de extorsión por la cual, en colaboración con la Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios (Ausbanc), interpondrían querellas y después exigirían grandes sumas de dinero a cambio de retirarlas.
Los presuntos pagos para retirar las querellas se justificarían como publicidad y compra de ejemplares de la revista mensual de Ausbanc, Mercado de Dinero, que se publica desde el año 1990. Además de no retirar los procesos judiciales si se negaban a pagar la cantidad exigida, la trama de extorsión jugaría con la amenaza de desplegar una campaña de desprestigio contra los acusados en esta y otras publicaciones de la asociación.
Sobornos a cambio de retirar la demanda contra la Infanta Cristina
Asimismo, en los últimos meses el sindicato ha vivido su mayor exposición mediática por ser la única parte en sacar adelante su acusación contra la Infanta Cristina por el caso Nóos. Sin su denuncia, el proceso contra la hermana del Rey no estaría siendo juzgado en las salas de los tribunales y ella sería absuelta.
Sin embargo, El Confidencial afirma que Manos Limpias y Ausbanc negociaron con La Caixa y al menos otro de los bancos españoles más importantes la retirada de la querella contra la Infanta a cambio de 3 millones de euros, que se abonarían en dos plazos: el primero por anticipado y, el segundo, una vez se concluyera el proceso judicial definitivamente. Pau Molins, uno de los abogados de la Infanta, también ha confirmado que le pidieron una cantidad "absolutamente desorbitada" para retirar los cargos.
La abogada del sindicato, Virginia López Negrete, afirma desconocer este tipo de actividades y asegura que, de demostrarse las maniobras del caso Nóos, tomaría "acciones penales contra los responsables de esa negociación". Además, desvincula esta presunta trama con la retirada de los cargos de Tejeiro, el asesor fiscal de Urdangarin y Diego Torres, lo cual justifica con el hecho de que pasara a ser testigo y se viera obligado a testificar ante el juez diciendo la verdad. Por su parte, desde el sindicato afirman que las operaciones llevadas a cabo contra ellos es una represalia por parte del Estado y de los bancos por el juicio que se llevará a cabo en Luxemburgo por las cláusulas suelo de las hipotecas.
