El pasado viernes, una reyerta en un local de copas de la zona de noche de Zaragoza terminó con el asesinato de Víctor Laínez. Vecino de Zaragoza y natural de Terrassa, Laínez, de 55 años, falleció tras la agresión a causa de lesiones cerebrales. Las autoridades zaragozanas han informado del arresto de Rodrigo Lanza, de 33 años, como presunto autor del asesinato. No obstante, lo que puede aparentar ser una pelea de noche con un final catastrófico esconde un enfrentamiento por motivos ideológicos.
Rodrigo Lanza, presunto autor del asesinato, es un barcelonés conocido por su participación en grupos antisistema. Sin embargo, en el pasado ya fue acusado de lesiones graves a un guardia urbano que quedó en estado tetrapléjico al recibir una pedrada en la cabeza. Tras ese acontecimiento, Lanza tomó cierta sonoridad al argumentar que su acusación se fundaba sobre un montaje policial. Por su parte, Víctor Laínez se considera afín a grupos de extrema derecha: "Víctor era falangista y legionario, y ya militaba en FEJONS en los años 80", publicó la página de Facebook de las Fejons.
El motivo ideológico parece el desencadenante de la reyerta, que concluye con el asesinato de Laínez. La investigación de las autoridades explican que antes de que la pelea se desatase, Rodrigo Lanza junto a otras tres personas, un hombre y dos mujeres, cruzaron insultos con Laínez entre gritos de "facha" y "franquista". El enfrentamiento pasó a mayores, y supuestamente Rodrigo Lanza asestó a Laínez un golpe en la cabeza, seguido de patadas en el suelo. Tras la agresión, los efectivos sanitarios trasladaron a Víctor Laínez al Hospital Clínico de Zaragoza, sin lograr hacer nada por salvar su vida. Laínez falleció este lunes debido a las graves lesiones cerebrales.
Con Rodrigo Lanza detenido, las autoridades investigan la posibilidad de que otras personas estuviesen involucradas en la agresión que acabó con la vida de Laínez. Parece que al menos alguien más agredió a Laínez cuando ya estaba en el suelo.
Clima de agresiones
En los últimos meses las agresiones por motivos ideológicos se han sucedido en diferentes escenarios, como los disturbios del 29 de octubre en Barcelona o los del 9 de octubre en las concentraciones de Valencia. Este último enfrentamiento termina con el brutal asesinato de una persona. El clima de inestabilidad política actual está dejando margen de actuación a los grupos radicales sin que el gobierno haya tomado en cuenta en ningún momento este clima de violencia creciente en las calles.
