Juan Francisco Vargas, padre del niño desaparecido en Vecindario (Canarias) hace 13 años, ha vuelto a ser detenido por la Policía horas después de quedar en libertad. Ha sido denunciado por otra niña de 13 años, hija de una expareja de la que también habría abusado.
El acusado había quedado esta misma semana en libertad con una orden de alejamiento después de que su misma hija, de la misma edad, lo denunciara por un hecho similar. La otra víctima vive en Fuerteventura y su madre mantuvo una relación con el detenido hasta el mes de diciembre del año pasado. Denuncia haber sufrido abusos sexuales por parte del acusado hace un año.
La menor vio el caso en los medios de comunicación, momento en que decidió contar todo a sus padres, que no estaban informados. Fue entonces cuando inmediatamente acudieron a una comisaría de Policía Nacional. Los investigadores dan credibilidad al testimonio de la joven de 13 años, tras desplazarse hasta Fuerteventura para tomarle declaración.
Dos arrestos en una semana
Con esta detención, el Juan Francisco Vargas vive dos arrestos en tan solo una semana, después de que la Policía Nacional le detuviese en la madrugada del pasado lunes por una supuesta agresión sexual a su hija de 13 años. La detención se produjo, también, en Las Palmas de Gran Canaria después de la denuncia presentada por la propia menor.
El acusado rechazó declarar ante el Juzgado de Instrucción número 6 de Las Palmas y el juez decretó entonces libertad provisional con cargos. El magistrado le ha impuesto por ello una orden de alejamiento respecto a su hija mientras se desarrolla la investigación.
El pasado 10 de marzo se cumplieron 14 años de la desaparición de Yéremi Vargas en 2007, cuando tenía siete años. Al niño se le perdió la pista mientras jugaba en el descampado situado junto a la vivienda familiar en Vecindario, en Santa Lucía de Tirajana (Gran Canaria), Los hechos siguen sin aclararse y las diligencias abiertas.
Durante el desarrollo de las investigaciones se ha llegado a imputar a una persona, a Antonio Ojeda Bordón, conocido como 'El Rubio'. Este hombre termino de cumplir una condena en 2020 de cinco años por abusar sexualmente del un niño de nueve años. Se le imputaron vinculaciones entre su vehículo y el coche sospechoso que se halló en la zona de la desaparición. Pero el juez del caso no consideró que los indicios eran sólidos y archivó la causa en 2017.
Al padre de Yéremi también se le llegó a investigar en esta causa, pero nunca se llegó a ninguna conclusión, por lo que finalmente fue descartado. La Policía Nacional coincide en desvincular estos casos de la desaparición de Yeremi Vargas.
