La Policía Nacional ha detenido en Palma a dos hombres de nacionalidad española acusados de presuntos delitos de agresión sexual y corrupción de menores sobre los dos hijos de uno de ellos, de 12 y 14 años. El padre de las víctimas, de 53 años, ha sido arrestado acusado de prestar a sus dos hijos a un amigo de 71 para que abusara sexualmente de ellos a cambio de ropa y dinero. Ambos pasaron a disposición judicial el martes, aunque no ha trascendido la situación procesal en la que se encuentran.
La madre de los menores ha denunciado la situación, algo que ha motivado que los hechos hayan salido a la luz. La mujer había puesto los hechos en conocimiento del Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales. Al no obtener una solución, comunicó el caso a la Dirección General de Infancia, Juventud y Familia de la Consejería de Asuntos Sociales del Gobierno de Baleares, que denunció los hechos ante la Policía Nacional.
Fue el grupo de la Unidad de Familia y Mujer de la Policía quien tuvo conocimiento de la denuncia, quien se presentó en comisaría a principios de mes. Los agentes encargados del caso comenzaron a recabar información y a tomar declaración al entorno de las menores. Finalmente, el martes detuvieron al padre de los niños y a su amigo, acusados de presuntos delitos de agresión sexual y corrupción de menores. Las víctimas han pasado a estar bajo tutela de la madre como medida de urgencia.
Cuatro años
Los hechos comenzaron hace cuatro años, según explica la Policía Nacional. El padre, que tiene la custodia exculpa, comenzó a frecuentar la casa de un amigo de 71 años en una localidad céntrica de la isla. Allí llevaba en ocasiones a los dos menores, a quienes dejaba solos con su amigo para que pudiera abusar de ellos. Allí llevaba a los dos menores, a los que dejaba solos con su amigo para que pudiera abusar de ellos a cambio de dinero y de ropa, que en muchas ocasiones se quedaba el propio progenitor.
Cuando los menores le contaron a su padre lo que ocurría al quedarse solos en la vivienda con el hombre, el padre negaba los hechos e incluso insistía en negar que pudiera suceder algo similar. La Policía Nacional señala que las víctimas han denunciado malos tratos por parte del padre, que llegaba a la vivienda en estado de embriaguez y les pegaba con un cinturón con la hebilla de hierro, con unas botas con la punta de acero. Los menores cuentan con expedientes abiertos desde 2009, según el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales.
