Los rumores van cambiando conforme la fecha de presentación del nuevo iPhone se acerca. Y, por increíble que parezca, aún quedan meses para que Apple presente de forma oficial su nuevo terminal; pero eso no impide que las redes sociales estén ya plagadas de suposiciones de lo que este móvil podría llegar a ser.
En un primer momento, todo apuntaba a que este año veríamos un iPhone 8 en lugar de un iPhone 7s. El salto de una generación a otra siempre indica que los cambios, tanto externos como internos, son más considerables. No obstante, ahora todo ha cambiado. Según Timothy Arcuri, un analista de la empresa Cowen and Company, lo que Apple tendría pensado hacer es presentar un terminal totalmente diferente a lo que estamos acostumbrados, algo rompedor, capaz de dejar boquiabiertos incluso a los menos fanáticos. Y este nuevo iPhone se llamaría iPhone X.
Esto no implica que el iPhone 7s no vaya a llegar al mercado. Al parecer, podrían llegar dos nuevos móviles este año: el iPhone 7s, como una actualización rutinaria y que la empresa considera necesaria para todos aquellos que ya quieren renovar, y el iPhone X, como un homenaje a los diez años desde el primer iPhone original.
Se espera que el iPhone X sea lanzado en septiembre, puesto que este es el mes en el que Apple tiende a presentar todos sus teléfonos. El nombre nuevo será solo un adelanto de todas las novedades que este terminal podría llegar a presentar. El rumor que más fuerza está cogiendo últimamente es el que apunta a que el iPhone X podría llegar estar disponible en tres tamaños diferentes: 4'7 pulgadas y 5'5 pulgadas, que son los tradicionales, y 5'8 pulgadas, un poco más grande de lo habitual. El resto de los cambios ya se han ido mencionando anteriormente, y van desde la desaparición del botón Home hasta una pantalla sin ningún tipo de marco, donde todo sea completamente táctil.
Se ha hablado también mucho de la posibilidad de que este nuevo iPhone (ahora conocido como el iPhone X) introduzca un nuevo sistema de carga inalámbrica, algo que los usuarios de Apple aún no han podido probar en primera persona. Además de esto, hay quien ha señalado también que Apple podría buscar implementar en este nuevo móvil una característica hasta ahora desconocida, capaz de reconocer tanto los gestos como los rasgos faciales. Gracias a esto, el móvil podría ser controlado sin necesidad de tocarlo directamente, además de ser desbloqueado con un simple vistazo a la cámara.
Por ahora, todo es un secreto. Y la compañía seguramente lo mantendrá así hasta el mismo día de la presentación, cuando Tim Cook se encargue de mostrarle al público todo en lo que han estado trabajando. Hasta ese momento, podremos mencionar mil rumores, pero realmente no sabremos cuál de ellos es cierto y cuál no.