El Ayuntamiento de Totana ha denunciado en un comunicado que Antonia García, una joven vecina lesbiana premiada con un galardón LGTBI en la localidad murciana, "ha sido despedida de uno de sus empleos tras conocer la obtención del premio y no esconder su condición sexual durante su intervención al recibir el galardón".
El premio al que se refieren es el III Certamen Literario LGTBI, que organiza la Concejalía de Igualdad, por su microrrelato 'El Origen'. Tras este hecho, fue despedida en uno de los dos trabajos en los que realiza tareas domésiticas y cuidado de mayores.
El Ayuntamiento denuncia que "el lamentable hecho tuvo lugar unos días después de que los empleadores vieran a través de los medios de comunicación el acto de entrega de premios del certamen literario". En dicho acto, reconocieron a la escritora, que había participado en el reconocimiento público, al que había acudido acompañada de su pareja.
El concejal de Igualdad y Derechos del Colectivo LGTBI, Javier Baños, ha denunciado que este acto de homofobia es "deplorable" al producirse en Totana, ya que "supone un hecho degradante, discriminatorio y ofensivo por el simple hecho de la orientación homosexual de una persona, y que ha conducido a la discriminación de Antonia, perdiendo uno de sus trabajos".
España retrocede nueve puestos en el ranking de bienestar de personas LGTBI
Estos hechos se producen mientras Amnistía Internacional advierte del retroceso de España en la situación de las personas LGTBI en el último año, tras el aumento de las denuncias de delitos de odio por cuestiones de orientación seuxal.
El país ha retrocedido nueve puestos en el índice anual Rainbow Europe, una clasificación de la asociación Internacional de Gays y Lesbianas ILGA Europe que analiza la situación legal y política de las personas LGTBI en 49 países europeos.
España se sitúa ahora en el puesto undécimo, cuando en el año 2020 ocupaba el sexto y en 2011 llegó a copar el segundo puesto en el ranking internacional. Amnistía Internacional reconoce que la situación de España "es menos preocupante que en otros países", pero "se está produciendo un incremento de las denuncias por delitos de odio debido a la orientación sexual y la identidad de género", ha alertado.
Ante esta situación, han urgido: "Es necesario que todos estos casos se investiguen de forma adecuada" y han reclamado "medidas firmes frente a los discursos de odio y al incremento de este tipo de delitos".
Según los últimos datos del Ministerio del Interior, en 2021 se recibieron 1.801 denuncias por delitos de odio, el mayor número desde que en 2014 se comenzaron a publicar estadísticas. La cifra supera en un 5,6% las registradas en 2019, cuando se contabilizaron 1.706 casos.
Los delitos de odio dirigidos a personas por su orientación sexual e identidad de género han subido al segundo lugar, con 477 denuncias (el 26,5% del total), una cifra que casi duplica la de 2020, año en el que se registraron 277 denuncias.
