Arnold van den Bergh, un destacado notario judío, habría sido la persona que reveló a los nazis donde se encontraba el Anexo Secreto, la extensión trasera del edificio en Amsterdam donde durante dos años y medio se escondieron Ana Frank y su familia antes de ser descubiertos y enviados al campo de concentración de Auschwitz.
Así lo asegura un equipo de investigadores internacionales, entre ellos el agente jubilado del FBI Vince Pankoke, quienes han hecho pesquisas durante seis años en un intento por resolver uno de los casos abiertos más antiguos de la historia.
En unos resultados que se han publicado este lunes 17 de enero, 77 años después de lo ocurrido, los investigadores concluyen que este notario habría traicionado a la familia de Ana Frank a cambio de proteger su vida y la de su propia familia. Se trata de una teoría que hasta el propio Otto Frank, el padre de la joven y único superviviente de la familia tras pasar por Auschwitz, dio por válida en su momento pero no quiso hacer pública debido al antisemitismo de la posguerra.
La investigación
La investigación todavía tiene que confirmarse por expertos independientes. Para llevarla a cabo, el equipo ha revisado numerosos datos, registros perdidos e informaciones de testigos fallecidos y "puesto que no hay pruebas de ADN o imágenes de video en un caso tan antiguo, siempre habrá que confiar en la evidencia circunstancial, pero esta teoría tiene una probabilidad de al menos el 85%", ha explicado Pankoke en la televisión pública de Países Bajos.
La teoría se basa en la copia de una nota anónima que fue entregada al propio Otto Frank después de la Segunda Guerra Mundial y que los investigadores han localizado entre los papeles de un oficial de Policía.
Así, el Consejo Judío habría elaborado listas de escondites con la intención de demostrar a los alemanes que estaba cooperando y, como miembro de este organismo, Arnold van den Bergh pudo haber obtenido este archivo de direcciones que luego utilizó para proteger a su propia familia.
De esta forma, el notario consiguió un indulto temporal de deportación. Por otro lado, la dirección de la casa llegó a manos de un oficial alemán de SS que acudió el 4 de agosto de 1944 a arrestar a la familia. Aun así, los investigadores afirman que todavía faltan pruebas concluyentes sobre como este notario filtró la información o quién fue el que escribió la nota anónima que convenció a Otto Frank sobre esta teoría.