Georgios Kollias, un ciudadano griego que ha vivido en el Estado de Florida durante los últimos años, ha sido finalmente deportado por matar a un gato callejero con una ballesta.
El joven vive en una zona frecuentada por felinos a cuenta de los habitantes que reparten piensos para mantenerlos. Es frecuente verlos caminando bajo las palmeras o rebuscando en la basura.
Sin embargo, la imagen no fue del agrado de Kollias que, un día dado, decidió coger una ballesta y dispararla contra la cabeza de un animal. El gato, a duras penas, vagó unos cuantos metros hasta que finalmente falleció a causa de las heridas.
Su muerte causó toda una ola de indignación en la comunidad, que abrió una página de Facebook en la que llegaron a ofrecer una recompensa de 27 mil dólares a aquellas personas que ofrecieran información determinante para la investigación.
Al final, una de las cámaras de seguridad que se encontraba adosada a una de las casas de la zona, mostró todo lo sucedido. En ellas, se puede comprobar cómo el joven camina por la vía y se acerca premeditadamente al gato. Allí, fríamente, le asesta varios disparos con la ballesta en la cabeza.
Kollias fue finalmente detenido y trasladado a la cárcel de Turner Gulford Knight de Miami. Allí le impusieron una fianza de 25 mil dólares por los delitos de crueldad animal, con agravante en el uso de un arma mortal y manipulación de pruebas. Cada delito incluye una pena de entre cinco y diez años.
Finalmente, el hombre no cumplirá pena de cárcel, pero será deportado a Grecia para evitar que pueda repetir una acción de estas características. Ahora, los vecinos reclaman la investigación contra el dueño del hotel en el que trabajaba Kollias: sospechan que recibió órdenes para matar el gato y evitar que molestase a los huéspedes.