Los testigos no podían creer lo que estaban presenciando: la celebración de la Nochebuena había dado pie a que los vecinos comenzara a inundar las calles tirando petardos para celebrar las fiestas.
La pirotecnia, sin embargo, no es del agrado de las mascotas. El imponente ruido suele despertar los miedos de nuestros animales que, en más de una ocasión, acuden despavoridos para refugiarse en un rincón seguro de nuestras casas.
Sin embargo, este perro callejero no tuvo la suerte de resguardarse. Sin casa ni dueño, el animal presenció todo lo que sucedía sin poder huir hacia una calle que considerase segura.
Aterrorizado, algunos vecinos intentaron ayudarle. Sin embargo, en un momento dado, sufrió un ataque cardíaco del que no consiguió sobrevivir: "No sabíamos si tenía dueño, si era de la calle ni de dónde venía, pero sí sabemos que no tendría que haber muerto así", ha denunciado un grupo a favor de los derechos de los animales en su perfil de Facebook -las imágenes pueden herir la sensibilidad de los lectores-.
Los vecinos intentaron en todo momento reanimarlo, pero fue imposible puesto que el animal ya había muerto por el estruendo de los petardos. El suceso ha tenido lugar en la localidad de Cipolletti, situada en el centro de la capital argentina, en un momento sensible porque el gobierno municipal ha prohibido explícitamente la venta de este tipo de artefactos que generan tantos problemas de ruido.
Intención de prohibirlos en España
La decisión del municipio argentino ha sido motivo de réplica en España. Los primeros movimientos se han registrado en la localidad madrileña de Rivas-Vaciamadrid, donde los vecinos han pedido la prohibición de los artefactos ruidosos porque "el uso de la pirotecnia puede causar graves perjuicios".
Por ello, han pedido al gobierno municipal "la prohibición definitiva de la venta, distribución o uso de petardos", así como que se "persiga y sancione con rigor este tipo de actividades".
Los vecinos proponen la sustitución de "estos fuegos artificiales tradicionales por otros que no produzcan explosión sonora o ruido", y han destacado que su petición a través de Change.org ha conseguido 1.000 firmas en solo cinco días.