Deliveroo ha anunciado su intención de dejar de operar en España. La compañía ha publicado un comunicado en el que asegura que se dispone a realizar una consulta entre sus empleados sobre el cese de sus operaciones en nuestro país, un formalismo antes de anunciar el cierre definitivo, ya decidido por la empresa, según El Confidencial.
La decisión de abandonar nuestro país se produce, precisamente, dos semanas antes de la entrada en vigor de la Ley Rider el próximo 12 de agosto. La firma asegura que la norma hacía inviable el modelo de la empresa. La ley acaba con los 'falsos autónomos' en el sector.
Deliveroo opera actualmente en 12 mercados de todo el mundo y la gran mayoría de sus ingresos procede de mercados en los que ocupa la primera o segunda posición. En nuestro país tiene un lugar destacado dentro del mercado, ya que es tercero y cuarto, según la ciudad, tras Uber, Glovo y just Eat.
La firma asegura que nuestro mercado representa "menos del 2%" de sus ingresos a nivel mundial en el primer semestre de 2021. "La compañía ha llegado a la conclusión de que alcanzar y mantener una posición de mercado de primer nivel en España requeriría una inversión muy elevada, con un rendimiento potencial muy incierto a largo plazo que podría afectar a la viabilidad económica del mercado para la empresa", afirma en un comunicado, donde no menciona directamente a la Ley Rider.
Deliveroo espera ahora iniciar un proceso de consulta a sus trabajadores sobre el cierre que comenzará a principios de septiembre. La decisión de cesar las operaciones estaría, sin embargo, ya adoptada, según publica El Confidencial.
Sobre el futuro de los riders, la compañía asegura en su comunicado: "En caso de que se decida poner fin a sus operaciones tras la conclusión del proceso de consulta, que durará aproximadamente un mes, la empresa se asegurará de que los rieres y los empleados dispongan de un adecuado paquete de compensación que cumpla con todas las normativas y la legislación local".
Los movimientos de la competencia
Mientras que Deliveroo anuncia su cierre antes de la aplicación de la 'Ley Rider', la competencia estudia cómo adaptarse a la norma. Glovo, por ejemplo, solo ha contratado a una pequeña parte de sus repartidores (2.000 de 12.000, para posteriormente seguir trabajando con un modelo de autónomos que cumpla la ley, aunque puede terminar en los tribunales.
Glovo argumenta que, a partir de ahora, los autónomos tendrán libre elección de jornada yq ue podrán fijar libremente los precios del servicio, algo que anteriormente estaba en manos de las plataformas. Este resquicio, sin embargo, tendrá que ser estudiado.