Los testimonios del caso Nóos han dilatado bastantes días el orden de las declaraciones, pero la doctrina Botín no pudo evitar que la Infanta Cristina se sentase ante el juez y su intervención iba a llegar tarde o temprano. Ese día ha sido el 3 de marzo por la tarde, alrededor de las 18 horas: la primera vez que un miembro de la Casa Real declara ante la Justicia.
El turno de Cristina de Borbón ha llegado después del de Iñaki Urdangarin, marido de la Infanta y socio en Aizoon, a quien pudimos ver hace unos días muy nervioso tras la declaración del exdirector del Govern balear. Urdangarin ha declarado durante tres días, en los que ha recalcado en repetidas ocasiones que el Rey Juan Carlos nunca intervino para conseguir negocios para el Instituto Nóos. Eso sí, cuando la acusación ha querido utilizar un correo electrónico enviado al Rey por el duque, este se ha apresurado a pedir su desestimación porque "no estaba admitido" previamente.
También ha tratado de exculpar a su mujer, la Infanta Cristina, sobre la que ha dicho que nunca cargó gastos personales a Aizoon, sino que lo hizo él mismo o personas de su confianza. Entre estos gastos figuran el famoso safari a África o el encargo de 20.000 euros en vino. Una vez más, la defensa de Urdangarin se ha basado en el amor y la confianza del matrimonio y ha dicho que su empresa en Común era una "ilusión mía, un proyecto para mí que lo quería compartir con mi esposa", de ahí que Cristina no supiese nada, según él.
Ahora es el momento de que, por primera vez, sea la propia Cristina de Borbón la que se explique ante las preguntas del juez y de la acusación.
1 "Contestaré solamente a mi letrado"
Lo primero que ha querido aclarar tanto Cristina como su abogado es que solo iba a contestar a las preguntas de este y no de la acusación, es decir, del sindicato Manos Limpias. Este es un derecho que le han expuesto al principio de la declaración, por lo que durante los minutos siguientes se ha limitado a escuchar a la batería de preguntas de Virginia López, abogada del sindicato.
Ni el Ministerio Fiscal, ni la Abogacía del Estado, ni la Comunidad Autónoma han decidido realizar preguntas, así como tampoco el resto de la acusación.
2 "Los dos nos ocupábamos de nuestros hijos y cada uno tenía su labor profesional. Él se encargaba de la cuestión económica de la familia y yo de la agenda"
Con esta frase, y tras negar que tenga cualquier tipo de conocimientos económicos con relación o no con su trabajo, la Infanta Cristina se ha exculpado de los movimientos financieros que tenían lugar en las cuentas con Urdangarin.
3 "Aizoon nació para canalizar los ingresos de mi marido"
Según la Infanta, Aizoon fue idea de su marido y ella se limitó a fundarla. "Firmé en confianza con mi marido", ha vuelto a testificar, aludiendo una vez más a la ya manida 'confianza'. Según ella, nunca más volvió a intervenir en la empresa, ni siquiera acudió a las juntas.
En respuesta a la pregunta de su abogado de qué necesidad tenía de formar parte del 50% de dicha sociedad, una dubitativa Cristina ha contestado que lo hizo "por confianza, así me lo pidió y yo lo acepté". Además, ha aprovechado para aclarar que la Casa Real no les tenía prohibido desempeñar actividades empresariales.
4 "¿En cuántas personas confía usted?" ¡Eso no entraba en el examen!
Una de las anécdotas de la tarde se ha producido cuando el abogado de la Infanta ha querido saber en cuántas personas confía. A ella no le ha gustado la pregunta y le ha pedido que la replantee en pasado, es decir, "en cuántas personas confiaba por entonces".
Es lo que tiene ir al examen cuando te han pasado las preguntas.
5 No le preguntaba por Aizoon "porque no procedía"
La Infanta Cristina estaba muy ocupada por sus niños en esos años, razón por la cual entendía que "no procedía" hablar con sus amigos sobre temas económicos. Una cosa es poner tu nombre y tu firma, y otra preocuparte por la empresa que tienes con tu marido, aunque sirva para canalizar los ingresos familiares... ¿no?
6 "Nunca he tenido cuentas en paraísos fiscales"
Y Urdangarin, tampoco, ha aclarado la Infanta. Ha explicado, eso sí, que ahora tiene una cuenta en Suiza porque reside allí, aunque afirma que es perfectamente legal y se encuentra declarada.