El crimen perfecto no existe, pero el más imperfecto de todos parece que sí. Nuevos detalles sobre el caso del asesinato de Edwin Arrieta revelan el tremendo despiste que tuvo Daniel Sancho y que le posicionó como el principal sospechoso de haber acabado con la vida del cirujano poco después de que se conociese el suceso.
Después de supuestamente cometer el asesinato y el descuartizamiento de Arrieta, el hijo del actor Rodolfo Sancho acudió a un restaurante y allí fue donde tuvo uno de sus mayores errores. Según ha revelado 'El programa del verano', olvidó una mochila en cuyo interior había un cuchillo y una venda ensangrentada.
Uno de los testigos afirma que la apariencia del joven le resultó sospechosa ya que "tenía su mano derecha vendada y estaba sangrando". En aquel momento, Sacho aseguró que se había cortado pelando un coco.
Mientras el chef disfrutaba de su desayuno y compartía un vídeo en su Instagram aparentando normalidad, los autoridades de Tailandia ya habían descubierto en un vertedero parte de los restos humanos del colombiano, aún sin identificar, junto a un ticket que los llevó al establecimiento donde se habían comprado las herramientas par cometer el crimen.
Al revisar las cámaras de seguridad de la zona, la policía rastreó las pistas de la moto que Daniel Sancho había alquilado. Con ello lo identificaron como principal sospechoso y al dar con sus redes sociales, llegaron hasta el restaurante donde había desayunado. Allí, encontraron la mochila con el cuchillo y la gasa con restos de sangre que se había dejado.
De esta forma, cuando Daniel Sancho acudió a la comisaría para denunciar la desaparición de su amigo, ya estaba en el punto de mira.
Arrieta murió degollado
Daniel Sancho espera que la Policía de Tailandia entregue a la Fiscalía el informe definitivo de la investigación sobre el crimen. "Acorralado" por las pruebas, piden para él la pena de muerte, insistiendo en que actuó con total premeditación.
La autopsia ha revelado que Arrieta murió degollado. Su cadáver presentaba cuchilladas en el pecho y un profundo corte en el cuello. Primero se habría producido un forcejeo tras el cual el cirujano sufrió un golpe en la cabeza. Después fue degollado y, tras ello, se produjo el descuartizamiento del cuerpo.