Daniel Bernabé (Madrid, 1980), escritor, columnista y tertuliano, presenta su primera novela, 'Todo empieza en septiembre'. 'La distancia del presente' y 'Ya estábamos al final de algo' son algunas de sus obras ya publicadas previo a su primera andadura dentro del mundo de la ficción. Describe la obra como una "autoficción", detallando que "no es un libro autobiográfico" ya que trata "cosas bastante universales".
'Todo empieza en septiembre' cuenta la vida de Jaime, un escritor y periodista de 40 años "afectado por la precariedad" y con "una vida a la deriva". Un día recibe un correo "misterioso" con una foto en la que aparece "gente muy poderosa" y que deberá de investigar para llegar a descubrir que se está "intentando alterar nuestra democracia".
Reconoce que ha querido contar cómo la crisis de la pasada década "nos alteró planes y expectativas" y la sensación de "incertidumbre" que dejó a la gente. Cuenta cómo al personaje "le va a cambiar la vida" recibir ese correo y, por tanto, que "el Jaime de la página 1 no es el de la página 400". En cuanto a cómo reaccionaría si recibiera ese correo ha asegurado que se "asustaría mucho". "Las novelas nos pueden llevar a puntos donde nunca nos pondríamos", asegura.
Recuerda que su libro 'La distancia del presente', una crítica de la política y la sociedad durante la pasada década, le ha "servido para tener un orden", ya que ha construido algo similar pero desde "lo emocional". Considera que ha tratado temas importantes pero "nada grave", ya que hay que tratarlos siempre "sin perder la sonrisa".
El peligro de la extrema derecha y el futuro
Respecto a si la extrema derecha supone una amenaza real contra la democracia, ha sido tajante: "sin duda". Apunta que estas "fuerzas pasadas"" que llevaban desde el pasado siglo "agazapadas" han salido tras la crisis, quedando plasmado en el "asalto" de los seguidores de Bolsonaro en el Congreso en Brasil o la "turba ultraderechista" que asaltó el Capitolio en Estados Unidos. "Distintos tipos de poder están intentando retrotraer nuestra democracia", afirma.
Hablando del 15M y de la aparición de partidos como Podemos ha reconocido que cree que ese sentimiento revolucionario se "ha perdido". "Se tenía una relación pueril con la política",comenta, aunque cree que los cambios van a seguir llegando, pero de otra manera: "Es más fácil escribir pancartas que confeccionar presupuestos. Es más atractivo lo primero, pero los cambios llegan con lo segundo. Los cambios llegan desde los sitios menos amables".
Ha finalizado reflexionando sobre la nueva generación y sobre su preparación ante el panorama político y social actual. Con esta nueva juventud hay que "ser optimistas" ya que " hay varias generaciones educadas en democracia y libertad".
