Dani Alves ingresaba en prisión preventiva el pasado 20 de enero tras haber sido acusado por la agresión sexual a una joven de 23 años en la discoteca Sutton. El alto riesgo de fuga precipitó su ingreso en el centro penitenciario Brians 2, de Barcelona.
Los nuevos abogados del exfutbolista han hecho lo posible para recurrir la sentencia. En el recurso, adjuntan como prueba los vídeos de la noche de los sucesos en la discoteca, que aseguran "desmienten" la versión de la víctima de violación.
Cristóbal Martell es el nuevo abogado encargado de la defensa de Alves. Desde entonces, para demostrar su presunta inocencia, ha pedido una cuarta declaración de Alves en un intento de recurso para su excarcelación y la obtención de la libertad condicional.
Lo que muestran los videos
Los abogados han aducido ante la Audiencia de Barcelona que los vídeos de la discoteca "desmienten de forma radical" la versión de la víctima y que no la muestran bajo un clima de "terror, pavor, o dominación" por lo que la declaración de la joven puede haber sido dada por una "distorsión narrativa".
Por otra parte, aseguran que en las imágenes del lugar de los hechos se puede ver "un grupo de cinco personas departiendo de un modo lúdico, rodeados de muchísima gente en un espacio abierto". Lo que "dista" de un "escenario de intimidación".
La defensa también ha querido desmentir la versión de la víctima en cuanto a que fuera Alves quien cerró la puerta del baño donde sucedieron los hechos. Según el abogado, primero es él quien entra en el recinto y, dos minutos después, lo haría la denunciante "sin que Dani Alves le franquee el paso".
Pruebas que confirman el relato de la víctima
Aunque la defensa mantiene que el relato de la víctima entra en "conflicto y contradicción" con las imágenes, en otros vídeos grabados por los Mossos d'Esquadra y por la propia discoteca, además de otras pruebas como las huellas dactilares encontradas en el aseo y el exámen médico de la víctima, siguen apuntando a la culpabilidad de Dani Alves.
No existe riesgo de fuga
A parte de las imágenes, la defensa del brasileño ha querido contradecir a la jueza que declaró el alto riesgo de fuga del exfutbolista, principalmente debido a su nacionalidad brasileña, país que no tiene acuerdo de extradición de sus habitantes.
El recurso argumenta que no se puede estimar el riesgo de fuga por la nacionalidad del acusado y además, que probó su disposición ante la justicia al acudir voluntariamente a declarar ante los Mossos. Por otra parte, consideran que el argumento por la capacidad económica del exfutbolista también quedaría tumbado después de haber sido despedido por su equipo y haber perdido campañas e inversores debido a la acusación.
Alves, por su parte, se ofrece a entregar su pasaporte, llevar una pulsera telemática para mantenerse alejado de la víctima, pagar la fianza que sea necesaria y comparecer, incluso diariamente, en el juzgado para abandonar el centro penitenciario lo antes posible.