La Cumbre de la Alhambra llega a Granada en plena presidencia del Consejo de la Unión Europea por parte de España. La ciudad acoge a medio centenar de mandatarios internacionales, en un momento en el que la presidencia española se encuentra en funciones y con el debate sobre la gobernabilidad sobre el horizonte, después de que el rey Felipe VI ya haya propuesto a Pedro Sánchez para la reelección.
La cumbre llega en un contexto internacional convulso, con el conflicto de Nagorno Karabaj, en un encuentro al que finalmente no ha asistido el presidente azerí (no se prevé, por tanto, reunión bilateral) y sin olvidar la guerra de Ucrania y el debate sobre la expansión de la UE hacia el este o los retos sobre la cuestión migratoria sobre la mesa.
Ante el reto de buscar una mayor integración en el marco europeo, esta idea surge por parte del presidente francés, Emmanuel Macron, en mayo de 2022. ante la necesidad de crear un marco de "cooperación" entre los países europeos, en el que se incluyen a los miembros de la UE y diecisiete naciones vecinas, entre las que incluye a Ucrania, Reino Unido, Turquía, Suiza o los Estados Balcánicos.
Esta es la tercera reunión de estas características, después de los encuentros celebrados en Praga y Bulboaca (Moldavia). Después de este encuentro, se prevé alternar sedes entre países de la UE y otros no pertenecientes, de hecho, la próxima cita se prevé en Reino Unido.
Espacio de encuentro
En el marco de esta reunión en la capital nazarí, se prevé una reunión plenaria a las 12:30 horas, a la que seguirán tres mesas redondas donde se abordarán asuntos geostratégicos, en concreto, la digitalización alrededor de la Inteligencia Artificial y su regulación, energía, medio ambiente y transición ecológica, así como el multilateralismo alrededor de la guerra de Ucrania y nuevos actores globales.
El programa se prevé que concluya a las 15:00 horas para, después, organizar un paseo por Granada y terminar con un paseo y una cena en la Alhambra.
Uno de los puntos más importantes de este encuentro era la reunión entre los presidentes de Azerbaiyán y Armenia, que mantienen un enfrentamiento por la región de Nagorno Karabaj. Sin embargo, finalmente, el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, ha rechazado participar en la cumbre, y reunirse con el primer ministro armenio, Nikol Pashinyan.
Se puso en duda en un primer momento, además, la presencia del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, por cuestión de seguridad. Finalmente ha aterrizado en la ciudad, su primera visita oficial a España desde el inicio de la guerra.
Otro punto sensible lo representa Kosovo, ante el conflicto que además mantiene con Serbia. Este país tendrá presencia en la cumbre, pero España no reconoce su soberanía. Por este motivo, se obviarán sus banderas y el nombre de los países, por lo que tan solo se mostrará el nombre del líder. Se recibirá a la presidenta, pero se subraya que saludarla no implica reconocer al país.
El objetivo de la cumbre es firme: encontrar unidad de acción en Europa en el contexto internacional actual y definir el reto de la ampliación de la Unión Europea, uno de los puntos que se definirán en la Cumbre de Granada. Los países candidatos más inmediatos se encuentran en los Balcanes Occidentales, Ucrania y Moldavia, que esperan dar cuenta de sus progresos para la apertura de negociaciones.
