Un grupo de agentes de la Policía Nacional ha detenido a cuatro personas tras haber propiciado una brutal paliza al inquilino de un piso del barrio de Santa Catalina (Palma de Mallorca) después de negarse rescindir el contrato de alquiler. Entre los arrestados se encuentran el propietario, su hijo y un ex policía nacional.
Los oficiales se trasladaron al domicilio después de recibir la llamada de la víctima. Al llegar a la vivienda, se encontrarían con cuatro de los seis implicados, que acudieron a la casa para agredir al chico, un joven pakistaní de 46 años. Según han confirmado fuentes judiciales, desde ese momento quedaron detenidos.
El diario Ultima hora ha publicado que los problemas entre propietario e inquilino venían desde dos semanas atrás. El dueño contactó con el perjudicado para decirle que tenía que rescindir el contrato que habían firmado hasta 2027 ya que quería convertir el inmueble en un piso turístico. La víctima dijo que no había problema y buscaría otro piso. Sin embargo, hace unos días se encontraron en un bar y el propietario marcó el 30 de mayo como fecha final.
Desde ese momento, el denunciado comenzó a llamarle en reiteradas ocasiones para que firmase la rescisión del contrato de alquiler ya que, de no hacerlo, cambiaría la cerradura del piso. El inquilino le insistía en que abandonaría el inmueble cuando encontrase otra residencia.
La brutal paliza
Aunque el tema ya estaba tornando en una tensión palpable, la tarde del 12 de febrero, alrededor de las 18:00 horas, el asunto empeoró drásticamente. Tal y como ha declarado el hombre ante dependencias de la Policía Nacional, el propietario del piso, junto a otros cinco acompañantes, entraron al inmueble y comenzaron a golpear la puerta.
El inquilino no daba crédito a lo que estaba sucediendo y decidió esconderse en el balcón, mientras avisaba a un amigo y llamaba al 091. Unos segundos más tarde, los seis agresores entraron en la vivienda y comenzaron a agredir al inquilino, que sufrió policontusiones en cabeza, nariz, labio y en el costado, por lo que tuvo que ser atendido en un centro de salud de s'Escorxador.
La Policía Nacional consiguió detener a cuatro de los seis implicados en el asunto, entre los que se encontraba un ex compañero de los oficiales. El martes 13 de febrero pasaron a disposición judicial y la magistrada sentenció libertad con cargos para todos ellos.