Elon Musk llegó a la Administración de Donald Trump tras un férreo apoyo durante toda la campaña electoral y prometiendo ejercer un importante plan de recortes. Sin embargo, su apuesta le está saliendo extremadamente cara. Las polémicas que ha protagonizado hasta ahora, incluyendo una especie de saludo romano en pleno mitin, se suman a las consecuencias de la guerra arancelaria que está emprendiendo la Casa Blanca.
El magnate ha perdido nada menos que 17.800 millones de dólares en tan solo dos jornadas, según los cálculos de XTB. Ese fue el resultado del batacazo bursátil de Tesla solo entre el jueves 3 de abril y el viernes 4 de abril, cuando Donald Trump presentó ante el mundo su paquete de aranceles que bautizó en una jornada del 'Día de la Liberación'.
La compañía del magnate, especializada en vehículos eléctricos, se desplomó entonces en Bolsa un 16% de todo su valor en dos jornadas, que se tradujo en una pérdida de capitalización bursátil de 139.370 millones de dólares. Si se tiene en cuenta que posee el 12,77% de las acciones de Tesla, perdió en realidad alrededor de 17.800 millones de dólares.
Caída anual
Pero los problemas no se limitan exclusivamente a la crisis derivada de los aranceles. Elon Musk también está sufriendo las consecuencias de su entrada en política, que ha llevado a una pérdida de popularidad de sus marcas y acciones de boicot de sus detractores.
Las acciones de Tesla se han desplomado más de un 35% en lo que llevamos de 2025. De este modo, el patrimonio personal de Elon Musk se ha visto mermado en más de 63.000 millones de euros solo en 2025, sin sumar las consecuencias para el resto de sus empresas privadas, según recoge XTB.
Ante las graves consecuencias que están generando los aranceles de Donald Trump, pero también el zarpazo que está viviendo en sus negocios, Elon Musk ha apostado ahora por distanciarse públicamente del mandatario, que también ha anunciado ya su salida del Ejecutivo.
Así lo ha manifestado Elon Musk, que en una intervención en un acto de la formación ultraderechista Liga de Mateo Salvini expresó su deseo de que Estados Unidos y la Unión Europea puedan cerrar una alianza comercial que implique cero aranceles a ambas orillas del Atlántico. Una afirmación totalmente opuesta a las políticas del Gobierno que apoyó.
El magante, mientras tanto, está experimentando campañas de boicot contra sus empresas y manifestaciones continuas, como la registrada ante sus concesionarios de Berlín el pasado sábado, 5 de abril. El magnate ha vivido una grave crisis de reputación por su papel al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), pero también por polémicas continuas como realizar el saludo romano en pleno mitin.
