El café es una de las bebidas más consumidas de España, sin ninguna duda. Ya sea como parte de un buen desayuno, a media mañana o como parte de una merienda; también como marco para socializarnos, lo cierto es que el café está presente en nuestro día a día.
Durante los últimos años han adquirido relevancia las máquinas que operan con cápsulas, ya que permiten realizar el café de manera instantánea. De manera paralela, en el supermercado han surgido todo tipo de variedades, así como competencia.
Con el objetivo de elegir las mejores opciones, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha elaborado un ranking con los cafés de cápsulas que venden en las tiendas españolas. Los mejores ya los explicamos en este artículo, estos son los peores.
Los peores cafés del supermercado, según la OCU
El análisis se ha realizado en base a cuatro criterios principales: la información que aparece en el etiquetado; la cantidad de humedad, sólidos solubles, cafeína y contaminantes presentes en las cápsulas (acrilamida y ocratoxina A). Además, un panel de expertos llevó a cabo la valoración organoléptica y se comprobó que no hubiera defectos en las cápsulas.
Con todo, las peores cápsulas son las Markus Ristretto 9 de los supermercados Aldi. La OCU califica las cápsulas de la marca blanca de Aldi como las peores, de mala calidad, con 40 puntos sobre 100, la más baja de todas. Destaca su composición, con 23 puntos sobre 100. El siguiente apartado es el de impacto ambiental (25 sobre 100). Su mejor nota se encuentra en contaminantes, con 70 sobre 100.
En el otro lado de la lista, se encuentran las cápsulas de marca blanca de Carrefour. Se trata del paquete de 30 unidades vendido por algo menos de 5 euros, con una puntuación de 78 sobre 100. El aspecto que más destaca es la composición, con una nota de 83 sobre 100, según el panel de expertos de la OCU. Además, los catadores pusieron una puntuación de 79 sobre 100 a su sabor.
La organización señala, sin embargo, que "los resultados del análisis son en general buenos o incluso excelentes". De hecho, "no se han encontrado restos de Ocratoxina A, una sustancia tóxica producida por un moho del café crudo". Además, "aunque sí se ha detectado acrilamida, una sustancia potencialmente cancerígena producida durante el tostado del grano, estaba en cantidades por debajo del límite fijado por la UE".
Además, la OCU denuncia que existe falta de información respecto al origen y variedad del café en el etiquetado de muchos de los productos. De la misma forma, también recuerda que "hay que tirar los posos de las cápsulas a la bolsa de basura orgánica, y a la de envases las cápsulas, ya sin posos, juntas y apretadas, de modo que puedan ser detectadas durante el proceso de reciclado".