En el mismo día en el que la URJC le pide cuatro años de prisión, la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha vuelto a criticar al ayuntamiento de la capital. La política ha utilizado nuevamente su canal predilecto, la red social Instagram, para subir un directo en el que carga duramente contra la limpieza de las calles que está ejecutando el Consistorio.
Cifuentes, que se encuentra procesada por falsedad documental (un delito castigado con entre tres y cinco años de cárcel), ha efectuado repetidas críticas contra la gestión de Cibeles. Una administración con la que ya tuvo muchos enfrentamientos cuando controlaba el gobierno regional.
En este caso, la política popular (que actualmente es simple afiliada de base), ha atacado un punto tradicional, la limpieza de Madrid, que cuenta con un servicio deficiente tras los contratos blindados por Ana Botella (PP) en el año 2014.
La limpieza de hojas, que año tras año se dilata en el tiempo por el cambio climático, ha llevado a Cifuentes a denunciar que las personas "pueden resbalar fácilmente", así como criticar que el Equipo de Gobierno no se dedica a "solventar las cosas que preocupan a los ciudadanos".
Esta denuncia no es la primera que realiza tras su dimisión por el Caso Máster. El pasado 20 de noviembre, la exlíder regional denunció la acumulación de agua que se produjo en la Plaza de Colón, que quedó "inundada" y provocó que "los peatones no podamos pasar". Ante ello, Cifuentes apostillaba: "¿Nadie del ayuntamiento de Madrid se preocupa por esto?".
La plaza de Colón inundada. Los peatones no podemos pasar... ¿Nadie del ayuntamiento de Madrid se ocupa de esto? pic.twitter.com/5W7zI7kkUv
— Cristina Cifuentes (@ccifuentes) 20 de noviembre de 2018
Tras su mensaje, la delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, respondió con las siguientes palabras: "Qué rápido se olvidan las cosas. Toda la gestión de saneamiento es del Canal de Isabel II, que por cierto, ya está yendo a Colón".
Su sucesor también muestra su enemistad con Carmena
Las diferencias entre la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento no han terminado con la dimisión de Cifuentes. Su sucesor, Ángel Garrido, de carácter más moderado, está pugando dentro de su partido por la reelección, lo que ha favorecido una serie de desencuentros muy polémicos.
El choque principal entre ambas administraciones se ha producido en mitad del estreno de Madrid Central, el plan de Carmena para reducir el tráfico de vehículos privados al centro de la capital.
Relataba el pasado 11 de noviembre el diario El Mundo, sobre Ángel Garrido:
Un sector del partido le ha afeado que en un primer momento accediera a negociar con el Ayuntamiento de la capital el refuerzo en el transporte público ante la puesta en marcha de Madrid Central, prevista para el 30 de noviembre, a pesar de que rápidamente rectificó esa postura. El plan para prohibir -salvo excepciones- el tráfico privado en un área de 472 hectáreas es ahora la principal arma de oposición del Grupo Municipal Popular contra el Gobierno de Manuela Carmena e internamente no se entendió que el Gobierno autonómico justificara este acercamiento apelando a la "colaboración institucional" para resolver "un problema"
Sin duda, la carrera electoral hacia los comicios que se celebrarán previsiblemente en el mes de mayo, se antojará dura. Por primera vez, el PP no tiene asegurada su victoria en la Comunidad de Madrid y cuenta con serias posibilidades de perder todo el poder que ha mantenido con puño de hierro durante más de dos décadas.
Madrid es la joya de la corona de los populares, aquel 'laboratorio liberal' de ideas donde se probaban programas para extenderlos al resto del país y un altavoz sobre sus resultados. El futuro de la región, sin duda, es una incógnita mayúscula.
