La expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha reconducido su carrera tras su abrupta salida de la política por un máster con las actas falsificadas y el vídeo de las cremas.
Su nueva faceta como colaboradora en Mediaset le ha llevado a mantenerse activa durante el estado de alarma y a acaparar más minutos en las pantallas aprovechando la falta de colaboradores, lo que ha consolidado su papel ante las cámaras.
Ahora, en esta nueva faceta, Cristina Cifuentes ha rememorado la época en la que salió de la política desde otra perspectiva, aunque sigue apuntando a la "cacería política", como ella denomina a la publicación de sus escándalos en medios de comunicación.
La clave sobre todo ha surgido en una entrevista en el canal de YouTube Estado de Alarma. Javier Negre le ha preguntado por el asunto de corrupción que, en teoría, fue el origen de los males de Cristina Cifuentes: la investigación del agujero en el Canal de Isabel II y el supuesto reparto fraudulento de la publicidad institucional que había realizado Ignacio González. Un supuesto fraude que, en teoría, quedaba demostrado en las actas del Canal que presentó ante la Justicia.
Javier Negre apunta: "Ese caso salpicaba a uno de los grupos de comunicación más importantes de este país, Atresmedia, liderado por un señor al que llaman 'El señor de las tinieblas', Mauricio Casals... ¿Quién guardó el vídeo durante tanto tiempo y quién lo saca?".
Cifuentes responde: "Lo sacó Atresmedia en connivencia con eldiario.es y OKDiario, tengo datos. Ya que has hablado sobre determinada persona, solo quiero decir lo que esa persona que has mencionado dijo sobre mí, y está en una grabación incorporada en el sumario de la Trama Púnica. Dijo: 'Esa señora las va a pasar putas'. Y he de decir que putas las he pasado, pero no putas, las he pasado reputas". Efectivamente, esas declaraciones aparecen en una conversación telefónica interceptada por la Guardia Civil entre Casals y el testaferro de Ignacio González, como publicó entonces en exclusiva el diario El País.
Sin embargo, Cifuentes dice que "no consiguieron lo que se proponían, está claro que había un objetivo personal, lo que querían conseguir era que hubiera terminado medio tarada, tomándome pastillas y tirándome a las vías del Metro, buscaban mi destrucción personal, pero no lo han conseguido".
"Es muy injusto considerar a VOX como un partido de ultraderecha, la criminalización que hacen de este partido es intolerable"
Cristina Cifuentes, que se erigió durante su etapa como presidenta de la Comunidad de Madrid como el 'verso progresista' del PP, ahora no considera que VOX sea un partido de extrema derecha.
"Yo a Santiago Abascal le tengo cariño, porque ambos hemos estado en el PP y hemos coincidido mucho, además conozco a Iván Espinosa de los Monteros o Rocío Monasterio, pero yo no soy de VOX ni de ningún partido, yo me considero más en el centro, pero hay muchas en las que coincido con ellos", ha afirmado.
Entre ellas, "no tiene sentido que te llamen facha por ir con la bandera de España", afirma. Aunque, añade:"Creo que es muy injusto considerar a VOX como un partido de ultraderecha, es un partido de derechas y es constitucional, esa criminalización que se hace de VOX y sus votantes es intolerable".