Los días de júbilo y celebración parece que se quedaron atrás cuando en Canadá, el primer país del G-20 en legalizar el cannabis, la alta demanda de marihuana legal ha sobrepasado tanto las expectativas que ha desaparecido de los estantes de todas las tiendas y lugares dedicados a su venta. "No hay suficiente marihuana legal para satisfacer toda la demanda recreativa en Canadá... La escasez está ocurriendo más rápido de lo que hubiera esperado", explica Rosalie Wyonch analista de políticas en el Instituto CD Howe a The Guardian.
Trevor Tobin y su madre, que abrieron una de las primeras tiendas legales de cannabis en Canadá, ven con rabia cómo no pueden satisfacer la alta demanda con las pérdidas que ello conlleva. "Después de una semana en la que hemos estado todo el tiempo pidiendo perdón a los clientes, estamos cansados de disculparnos" a lo que añade que les "dijeron que habría baches en el camino. Pero esto no es un bache, es un agujero", aseveraTrevor.
Se preveía esta escasez
"Nuestrainvestigación sugirió con bastante firmeza que habría escasez en el primer año de legalización" y que en Colorado, cuando se legalizó el cannabis, "tardó tres años para que el suministro finalmente alcanzara la demanda, y Canadá podría esperar un retraso similar", afirma Rosalie. Sin embargo, la culpa de estos problemas parece achacarse a errores logísticos, una mala distribución de cadenas de minoristas, una huelga postal y la combinación de losmarcos regulatorios.
En algunas tiendas y entidad gubernamentales como la Société Québécoise du Cannabis, en Quebec, ha decidido cerrar varios días a la semana para intentar racionar su stock de cannabis. Las ventas online, como es lógico, han tenido importantes problemas a la hora de atender la demanda; de hecho, en el sitio web Ontario Cannabis Store, administrado por el Gobierno, recibieron más de 100.000 pedidos, pero pocos llegaron, la mayoría con retrasos de dos semanas y algunos cancelados.
El monopolio del Gobierno
Quizás la raíz del problema esté en el monopolio en el suministro como apunta Baller, un trabajador de la oficina del defensor del pueblo de Ontario: "Lo peor de todo es que el Gobierno ha forzado un monopolio tanto en el suministro como en la entrega de productos de cannabis que luego no puede entregar". La oficina ha recibido más de 1.000 quejas y subiendo desde que se abrió la página web.
Las empresas proveedoras autorizadas se rigen por contratos con el gobierno, por lo que dificulta bastante nuevas fuentes de cannabis. Las nuevas licencias se van procesando y las empresas existentes van ampliando sus instalaciones, pero "la marihuana es una planta. Le lleva un tiempo crecer, ser procesada, empaquetada, enviada y probada", explica Rosalie.
Una oportunidad para el mercado negro
Esta escasez en el cannabis recreativo legal abre una oportunidad al mercado negro, por lo que el Gobierno podría perder la friolera de 800 millones de dólares que superaría con creces los ingresos fiscales estimados en el primer año de legalización. "Es probable que el Gobierno tenga éxito en la eliminación del mercado negro siempre y cuando la oferta legal funcione online rápidamente. De lo contrario, corremos el riesgo de afianzar un posible mercado negro", advierte Wyonch
Todos los comercios legales afrontan contemor esta gran escasez porque existe esa posibilidad que apuntaba Rosalie de que el consumidor viaje al mercado negro o ilegal. "Ahora que no podemos suministrarles, todavía consiguen comprarla. No hay escasez de hierba en la ciudad, sino de hierba legal", afirma Trevor.
