Investigadores de la Universidad de Columbia (Estados Unidos) han elaborado un sistema capaz de leer el pensamiento y transformarlo en lenguaje. En concreto, esta tecnología es capaz de reconstruir las palabras que una persona está oyendo y transmitirlas con una voz robótica, sencillamente monitorizando la actividad cerebral.
"Nuestra voz nos permite conectar con los amigos, la familia y el resto del mundo. Por eso, perderla a causa de una enfermedad o una lesión es tan devastador", ha explicado Nima Mesgarani, director encargado de la investigación. "Hemos mostrado que, con la tecnología adecuada, los pensamientos de estas personas pueden ser descodificados y comprendidos por cualquier persona que escuche".
Basándose en trabajos que demostraban que cuando la gente imagina que habla aparecen patrones de actividad cerebral característicos, el equipo de Mesgarani creó un algoritmo llamado 'vocoder', capaz de producir discursos hablados después de entrenar escuchando conversaciones. "Es la misma tecnología usada por Siri de Apple, por ejemplo", comenta Mesgarani. La diferencia se encuentra en que le enseñaron a interpretar patrones de actividad cerebral en vez de conversaciones.
Lo siguiente será usar frases más complejas
Para probarlo, aprovecharon operaciones cerebrales a las que los pacientes de epilepsia tienen que someterse habitualmente, para implantar electrodos capaces de leer la actividad durante la intervención mientras los pacientes escuchaban frases pronunciadas por distintas personas, en concreto, números del 0 al 9. Después, una inteligencia artificial basada en redes neurales, que imitan las conexiones cerebrales, limpió dicho sonido y emitió una voz robótica capaz de recitar los números.
"Descubrimos que las personas pudieron comprender y repetir los sonidos en el 75% de las ocasiones, lo que está muy por encima de los intentos previos", ha dicho Mesgarani. ¿Qué será lo siguiente? Según ha adelantado el investigador, los próximos objetivos son usar frases y oraciones más complejas que los números y hacer las mismas pruebas no solo cuando una persona escucha, sino también cuando una persona habla o imagina que habla. Parece que el futuro se encuentra más cerca de lo que pensamos.