La moción de censura presentada en la Región de Murcia contra el Gobierno del popular Fernando López Miras por parte de Ciudadanos y PSOE tuvo, inexplicablemente, su réplica en la Comunidad de Madrid. Isabel Díaz Ayuso, sin previo aviso, rompió su acuerdo de Gobierno con los naranjas, destituyó a todos los consejeros de Cs, incluyendo al vicepresidente Ignacio Aguado, y convocó elecciones anticipadas para el 4 de mayo.
"Con 1.641 personas hospitalizadas, 424 en UCI y 447.101 en paro, Ayuso ha decidido convocar elecciones. Su capricho es lo primero. Nos costará 20 millones de euros. Serán el 4 de mayo, martes. Si tiene hijos, cuente con que no habrá colegio. Un despropósito todo", dijo Aguado indignado aquel 10 de marzo.
Y lo cierto es que el ya exvicepresidente de la Comunidad de Madrid no iba desencaminado. El coste electoral de este llamamiento a las urnas se va a elevar hasta los 19,5 millones de euros, según han confirmado desde la Consejería de Presidencia. Esta cantidad incluye los gastos de trabajo de Madrid Digital, los contratos de la Secretaría General Técnica y la cobertura que garantiza el cumplimiento del protocolo sanitario, como los EPI para los miembros de las mesas electorales y las mascarillas que se repartirán a los ciudadanos que acudan a votar a los colegios electorales.
Esos cerca de 20 millones de euros constituyen, por ejemplo, la cantidad de dinero recaudada por la Comunidad de Madrid en materia de donaciones privadas durante los primeros meses de la pandemia del coronavirus. Pero también es una cantidad seis veces mayor a lo que se pagó a IFEMA para reconvertir sus pabellones en un hospital temporal para descongestionar la situación de las UCIs madrileñas.
Por otra parte, según recoge Cadena Ser, el Consejo de Gobierno ha aprobado también la autorización de 885.984 euros en concepto de adelanto de la subvención para gastos electorales "que es lo correspondiente que se les da a los partidos políticos".
Nuevas elecciones (y nuevo gasto) en 2023
La convocatoria de Ayuso tiene otra derivada: se han paralizado las negociaciones para aprobar los presupuestos de 2021 en la Comunidad de Madrid después de que no se aprobaran los de 2020. Serán dos años sin Presupuesto. Las cuentas públicas que se estaban negociando incluían un plan de ayudas de 1.000 millones de euros –600 en ayudas a empresas y otros 400 para las familias– para luchar contra los estragos económicos de la pandemia.
Por si esto fuera poco, en 2023 los madrileños y madrileñas tendrán que volver a desembolsar otra cifra simular, por lo que en cuestión de dos años, la Comunidad de Madrid se gastará cerca de 40 millones de euros en despliegues electorales. Y es que según contempla el Estatuto de Autonomía de la región, se establece que el nuevo mandato será "limitado" y expirará al agotarse el tiempo oficial de la "legislatura originaria". Es decir, en 2023.
