La Asociación de Militares Españoles (AME) es conocida por su apología hacia la dictadura franquista. Asimismo, ensalza la figura del dictador Francisco Franco y ha hecho una oposición férrea contra la Ley de Memoria Histórica. Sin embargo, estas razones no resultan suficientes para que el Ministerio de Defensa dirigido por la popular María Dolores de Cospedal le niegue recursos públicos de todos.
La AME, según informa Público tras comprobar un listado del portal de transparencia, tiene acceso a instalaciones públicas sin pagar ningún tipo de alquiler. Además, tampoco realizan el pago de la luz que gastan en dichas sedes e incluso tienen acceso gratuito a teléfonos y ordenadores.
Los fascistas tienen vía libre
Por si no fuera poca su defensa a ultranza del franquismo, la época más oscura de España durante el siglo XX, esta asociación edita y publica la revista Militares. En dichas páginas distribuidas entre los propios trabajadores del Ministerio se alaba constantemente la labor de Franco, así como el golpe de Estado del 18 de julio; se mofa del movimiento feminista y lanza viñetas sexistas contra la propia Cospedal.
Asimismo, esta publicación se distribuye de manera gratuita entre las unidades del Ejército. El contacto directo que tiene la asociación franquista con las tropas y su ocupación de las instalaciones de manera gratuita, así como el reparto de esta revista puede llevar a los militares a confundirla con una institución oficial, con el lavado de cerebro ideológico que ello conllevaría.
La AME forma parte del Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas (Coperfas), un órgano en el que las asociaciones pueden presentar propuestas que afectan al trabajo y a las condiciones de los militares. La relación es directa con la cúpula del Ministerio. Este consejo es el único cauce que tienen los soldados para reivindicar mejoras laborales puesto que tienen prohibido sindicarse.
Sin embargo, pese a que sea una plataforma de denuncia, la propia asociación franquista difunde su ideología y critica duramente a otras asociaciones, según declaran militares anónimos a Público. "¿Cómo puede ser que una asociación que defiende esos valores participe en instituciones oficiales?", se preguntan.
El Ministerio que dirige Cospedal permite a esta asociación franquista y retrógrada utilizar el acuartelamiento San Nicolás de Madrid del Ejército de Tierra mientras se lo niega a otras que realizan labores casi sindicales. En dichas instalaciones se encuentran otras instituciones que no forman parte de Defensa pero que tienen carácter oficial como el Patronato de Huérfanos o los Caballeros Legionarios.
Sin embargo, la AME no es la única asociación de ideología radical fascista dentro del Ejército. La Real Hermandad de Veteranos es una asociación que representaba a los militares hasta 2016. Dicha agrupación también realizaba publicaciones en una revista en la que lanzaban proclamas ultraderechistas. Tan graves fueron las ideas que divulgaban que incluso llegaron a pedir la ilegalización de Podemos.
La pasividad de los gobiernos de España, sobre todo los del Partido Popular, resulta casi insultante para todos los demócratas del país. Todavía en pleno 2017 existen grupos, asociaciones e incluso partidos políticos que no condenan la dictadura franquista y que, para colmo, tienen acceso a los recursos públicos de todos los españoles. Algo que, como mínimo, debería indignar a toda la población.