Eutanasia significa 'buena muerte', y es un término que sirve para designar la muerte digna que se le da a un paciente terminal cuando en vez de dejar que la enfermedad se lo lleve lenta y dolorosamente, se cumple su voluntad de ayudarle a morir antes.
Hay variedad de opiniones en cuanto a la eutanasia. Por una parte, muchas personas lo consideran un derecho humano ya que consiste en elegir sobre la propia vida de uno y, sin embargo, otros lo consideran asesinato, un acto carente de ética que más bien podría definirse como un suicidio asistido.
Por culpa de este debate, influido principalmente por nuestra herencia católica que nos dice que Dios se llevará a quien se tenga que llevar en su momento y que no debemos intervenir,hay muchos países en los que la eutanasia todavía no está legalizada.
Mientras los gobiernos, médicos y todos aquellos que se creen con derecho a opinar siguen con su debate, son muchas las personas que, padeciendo alguna enfermedad terminal, deben pasar sus últimos días sufriendo de una manera inimaginable deseando descansar en paz.
El corto
Una asociación australiana a favor de la legalización de la eutanasia llamada Go Gentle Australia ha creado un corto que muestra el sufrimiento de una persona en sus últimos días y la necesidad de poder elegir, en situaciones como esta, morir.
La intención concreta de la asociación es hacer realidad la legalizacion de la eutanasia en Victoria, un estado australiando donde el 75% de la población está a favor de la ley que permitiría hacer esta práctica y que se va a votar dentro de poco en el Parlamento. La prioridad de GGA es la dignidad del paciente y ha querido reflejar a lo que se enfrentan las familias y los enfermos en el día a día de una situación como esta.
El corto, titulado 'Stop The Horror' muestra, en apenas 5 minutos, unas imagenes que podrían haber salido de una película de terror. Es tan crudo que se ha hecho viral porque muy pocas personas son capaces de visionarlo entero.
En el vídeo se cuenta la historia real de Greg Sims, un paciente de 56 años con un tumor cerebral incurable que sufrio de una manera indecible sus ultimos días. Su hija y su mujer han estado presentes durante todo el proceso de creación y cuentan que, pese a la crudeza de las imágenes, lo que ellas vivieron fue "una historia de terror real".
En su momento no entendieron por qué una persona a la que amaban tanto tanía que enfrentarse a tanto sufrimiento, un sufrimiento que podría haberse evitado y que deja muchas vidas marcadas: la de su mujer, la de los médicos que no podian hacer más que darle calmantes y, por ejemplo, el trauma que le ha quedado a la hija de Greg porque a causa de la enfermedad de su padre la muerte llegó a causarle terror.