La celebración de los 94º edición de los premios Oscar será recordada, tristemente, por la reacción de Will Smith al comentario de Chris Rock sobre su esposa, Jada Pinkett Smith, que se burló sobre la alopecia que padece.
"Deja el nombre de mi esposa fuera de tu maldita boca", fueron las palabras que el ganador al Oscar como mejor actor le gritó a Chris Rock después de plantarle un puñetazo en el escenario, en pleno directo y ante la mirada de los asistentes.
El debate ha abordado temas como la masculinidad tóxica, pero también se encuentra en el control de la ira, una emociónque puede desbordarnos en cualquier momento.
La ira es una emoción normal, incluso sana, pero es importante afrontarla de forma positiva. La ira descontrolada puede afectar tanto a la salud de las personas como a sus relaciones con los demás. La Escuela de Medicina Mayo, una prestigiosa organización estadounidense sin ánimo de lucro, ofrece 10 consejos para aquellas personas que tienen algún problema a la hora de gestionar esta emoción.
1 Piensa antes de hablar
En un momento de enfado, es fácil decir algún comentario del que posteriormente puedes arrepentirte. Por ello, es mejor respirar, tomarse unos momentos para ordenar los pensamientos y permitir que otras personas involucradas en la situación también hagan lo mismo.
2 Una vez tranquilizado, expresa tu ira
Cuando puedas pensar con claridad, estarás en el mejor momento para expresar tu frustración de manera asertiva, pero sin confrontar con la otra persona. Podrás comunicar tus preocupaciones y necesidades de forma clara y directa, sin herir a los demás ni tratar de controlarlos.
3 Haz ejercicio
La actividad física puede ser una gran aliada a la hora de reducir el estrés que alimenta el enfado. Si sientes que estás aumentando progresivamente esa sensación, sal a correr o camina enérgicamente, o dedica un tiempo a hacer actividades físicas que disfrutes.
4 Toma tiempo para reflexionar
Los tiempos para reflexionar no son solo para niños, sino que son para todos. Date pequeños descanso a lo largo del día en los momentos que suelen ser estresantes. Algunos momentos de tranquilidad pueden ayudar a que te sientas mejor preparado para manejar lo que sucederá después sin irritarte o cabrearte.
5 Identifica posibles soluciones a los problemas
En lugar de concentrarte en aquello por lo que te has enfadado, esfuérzate por resolver el problema en cuestión. La ira, expresar tu cabreo, únicamente añadirá otro problema al que ya tenías, por lo que afronta todo de una manera más positiva y resolutiva, ya que será mucho mejor.
6 Recurre a declaraciones en primera persona
Para evitar las críticas o cargar con culpas a los demás, algo que podría aumentar la tensión, es recomendable utilizar declaraciones en primera persona para describir los problemas. Siempre desde el respeto y la opinión personal, como te sientes ante los hechos, antes que cargar directamente el peso de las acusaciones sobre la otra persona.
7 No guardes rencor
Perdonar a los demás es la mejor herramienta de la que dispones. Si permites que la ira y otros sentimientos negativos te invadan y sustituyan en espacio a los positivos, quizás notes que la propia amargura o sentido de la injusticia te abruman. Pero si perdonas a alguien que te enfureció, podrás aprender de la situación y fortalecer tu relación con los demás.
8 Usa el humor para aliviar la tensión
Tomar las cosas con calma puede ayudar a aliviar la tensión. Utilizar el humor como herramienta para afrontar todo lo que te cabrea y expectativas poco realistas sobre la vida permitirá afrontar la vida de una forma mucho más placentera. Evita, eso sí, el sarcasmo, puesto que puede herir los sentimientos y empeora las cosas.
9 Practica técnicas de relajación
Si te sientes abrumado, pon en práctica técnicas de relajación. La respiración profunda, con escenas relajantes o una palabra o frase que te tranquilice, te ayudará enormemente. También puedes escuchar música, escribir un diario o practicar algunas posturas de yoga, lo que sea necesario para relajarte.
10 Entérate de cuándo buscar ayuda
A veces, aprender a controlar la ira es un gran reto para todos. Si consideras que se encuentra fuera de tu control, que te fuerza a hacer cosas de las que después de arrepientes o que está haciendo daño a las personas que están a tu alrededor, siempre puedes buscar ayuda.