La cumbre de la OTAN en Madrid se ha marcado su primera victoria. Turquía ha firmado un pacto para levantar su veto a la adhesión de Finlandia y Suecia en la OTAN. Después de mes y medio de negociaciones, los tres países han logrado llegar a un acuerdo un día antes del inicio de la cumbre en la capital.
"Es histórico", afirmó el secretario de la Alianza, Jens Stoltenberg, "Putin quería menos OTAN y está consiguiendo justo lo contrario". Sin embargo, este pacto no ha salido gratis ya que el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha sido muy claro en sus condiciones para el pacto.
Cooperación en la lucha terrorista
El memorando que han firmado los tres países, aunque escueto, tiene un alto carácter de importancia. El primero de los puntos estipula que se debe "establecer un mecanismo conjunto y estructurado de diálogo y cooperación (...) para mejorar la cooperación en la lucha contra el terrorismo, la delincuencia organizada y otros retos comunes, si así lo deciden".
Asimismo, con el nuevo pacto, Erdogan exige que Finlandia y Suecia "investiguen e intercepten cualquier financiación y actividades de reclutamiento del PKK y de todas las demás organizaciones terroristas y sus extensiones, así como los grupos o redes afiliados o inspirados".
Este punto del acuerdo resuelve el principal reclamo turco: los dos países que estaban considerados como "refugios de terroristas", ahora colaborarán en la captura de los miembros del PKK. Por ello, ambos países ayudarán a Turquía llevando a cabo "la lucha contra el terrorismo con determinación y firmeza y, de acuerdo, con las disposiciones de los documentos y políticas pertinentes de la OTAN".
¿Y qué acuerdo habrá con la extradición de terroristas? En el convenio figura que tanto Finlandia como Suecia, "abordarán las solicitudes de deportación o solicitudes de extradición de sospechosos de terrorismo de forma rápida y exhaustiva, para facilitar la extradición y la cooperación en materia de seguridad". No obstante, deberá hacerse también de acuerdo con el Convenio Europeo de Extradición.
Luchar contra la desinformación
Otro de los puntos más importantes del pacto entre los tres países hace referencia a que todos ellos se comprometen "a luchar contra la desinformación y a impedir que sus leyes nacionales se utilicen de forma abusiva, en beneficio de organizaciones terroristas". Con ello Turquía logrará una mayor colaboración de los sistemas de seguridad finlandeses y suecos.
Y en relación al embargo de las armas, Turquía ha conseguido que Estocolmo y Helsinki levanten el embargo en el marco de la OTAN. Con ello Erdogan reclama así una unificación de la estrategia armamentística entre los tres países europeos.
Una política común
Finalmente, el último de los puntos que ha reclamado Turquía en el acuerdo es conseguir el apoyo de ambos países "en las iniciativas actuales y futuras de la Política Común de Seguridad y de la Unión Europea, incluida la participación de Turquía en el proyecto PESCO sobre Movilidad Militar". Con esto se espera que en cuestión de unas semanas tanto Finlandia como Suecia sean miembros oficiales de la OTAN, después de recibir la aprobación oficial de los 30 miembros.
