La justicia italiana ha condenado a los padres de Francesco Bonifazi a tres meses de cárcel por haberse negado a darle antibióticos para tratar la otitis que padecía. La infección, que podría haberse curado en un par de días si se le hubiese suministrado la medicación, le pasó del oído al sistema nervioso y derivó en unaencefalitis que le provocó la muerte en 2017.
Sus progenitores rechazaron el tratamiento que le proponían los médicos y acudieron a un homeópata, el doctor Mecozzi, que le recetó productos homeopáticos y no les advirtió de los riesgos que corría el menor en caso de que la otitis no se curara. Además, explicaron que habían tratado con este método a su hijo desde que nació y sus últimas otitis así habían sido curadas.
Mecozzi fue imputado por un presunto delito de homicidio al haber actuado con "negligencia" y violar los protocolos que establecen que, si en cinco días una terapia se muestra ineficaz, se debe administrar el tratamiento convencional. Según medios italianos, el homeópata le llegó a decir a la familia que si llevaban al menor al hospital le recetarían paracetamol y se quedaría sordo.
El 23 de mayo de aquel año, el pequeño perdió la consciencia y sus padres lo llevaron al hospital de Urbino, donde, como consecuencia de las complicaciones de la infección, se le detectó la encefalitis. A pesar de ser operado no se pudo hacer nada por él y falleció tres días después de ingresar en urgencias.
Los padres ya han anunciado que recurrirán la sentencia y señalan al médico como máximo responsable de lo ocurrido. Por su parte, el juicio al homeópata comenzará en septiembre. En 2018 el Colegio Oficial de Médicos de Pessaro tomó la decisión de suspenderlo de manera cautelar durante seis meses.
El auge del movimiento antivacunas:
El rechazo a las vacunas se ha convertido en tendencia en Estados Unidos, lo que ha llevado a que en muchos estados sea la ley la que deja en manos de los padres la decisión de vacunar o no a sus hijos, alegando razones éticas o religiosas.
No solo en Estados Uniudos, este movimiento tambié ha llegado a Europa. Este rechazo a las vacunas ha hecho que los casos de enfermedades como el sarampión se multipliquen por diez en los últimos tres años según la Organización Mundial de la Salud. Además, los turistas que forman parte del movimiento antivacunas han reintroducido el virus del sarampión en algunos países donde ya se había erradicado.