El director del periódico ultraderechista La Tribuna de Cartagena, Josele Sánchez, ha sido condenado a tres años de cárcel e inhabilitación por un delito contra la integridad moral en concurso con otro de revelación de secretos.
El juez concluye en su sentencia que "vejó gravemente" a la víctima de 'La Manada' con "ánimo de causarle daño" cuando publicó un artículo en su página web en el que, además, difundió los datos personales de la víctima y una fotografía tomada por los acusados en el caso de violación.
Josele Sánchez escribió en aquel artículo, publicado el 4 de mayo de 2018: "Mira, niño, yo no te creo. Tú no dijiste "NO" en ningún momento. Y, efectivamente, no te violaron [...] Irse con cinco tipos a un hotel no es para jugar a las cartas. Quisiste ir de guay y tener una experiencia de liberación femenina de esas de las que tanto se habla -e incluso se aconseja- ahora con la ideología de género", señalaba.
"Llevabas tal borrachera que decidiste montártelo con cinco macarras de mierda. Pero fuiste a follar, nadie te obligó, lo hiciste porque te lo pidió tu cuerpo serrano", fue lo que escribió Josele Sánchez, a quien la Justicia finalmente ha condenado a tres años de prisión.
"Expresiones vejatorias"
El magistrado no deja lugar a dudas en su escrito y concluye que "las expresiones son claramente vejatorias", a lo que añade que el escrito incluye "el nombre, apellidos, domicilio, centro de estudios universitarios de la víctima, etc, puesto que desde luego carecen por completo de relevancia para la opinión remitida".
En el texto incluso se incluyeron fotografías de la agresión que la víctima se negó a ver durante el juicio, "lo que reviste un carácter particularmente degradante y vejatorio", añade la sentencia. El juez resalta que la joven "había rehusado ver esa instantánea durante el juicio en la Audiencia de Navarra".
La sentencia también indica que el texto fue publicado con la "intención de vulnerar la privacidad de la víctima y a sabiendas de su carácter ilícito", cuando se debía "haber extremado la prudencia", incluso a la hora de emitir opiniones sobre la sentencia que condenaba a 'La Manada': "Nos encontrábamos ante unos hechos extremadamente delicados, una agresión sexual en grupo frente a una joven completamente anónima, que súbitamente se encuentra en el ojo del huracán en relación a una sentencia que dio lugar a todo tipo de debates, con repercusión mediática en informativos, manifestaciones a escala nacional, etc".
"Todas estas circunstancias exigen que las opiniones respecto de los hechos enjuiciados extremen la prudencia, máxime cuando el procedimiento de origen finaliza con una sentencia condenatoria en la que se reconoce a la perjudicada la condición de víctima de un delito de naturaleza sexual", añade la sentencia.
El magistrado Álvaro Bellas recuerda que "finalmente esta y solo esta es la realidad jurídica, por encima de los pensamientos, creencias u opiniones". El juez reconoce, además, que es "perfectamente lícito estar en desacuerdo con una sentencia, pero desde luego no resulta amparado por la ley el empleo de términos hirientes o lacerantes ante quien resulta ser víctima en un delito contra la libertad sexual y menos aún la publicación de fotografías de claro contenido sexual y la difusión de datos de identificación de la víctima".
Además, se señala que "dio lugar a la cosificación de la víctima, puesto que la convirtió en un mero instrumento para defender el carácter voluntario del acto sexual", según recoge la sentencia.