La Audiencia Provincial de Sevilla ha condenado a seis años de cárcel, una multa de 7.200 euros e inhabilitación especial para el ejercicio de cargo o empleo público a Fernando Villén (PSOE), exdirector general técnico de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe). Esto ha sido por la utilización de tarjetas bancarias de la fundación para el pago de servicios en locales de alterne.
Ha sido condenada por los mismos hechos a cinco años y tres meses menos un día la exdirectora económica-financiera de la Faffe Ana V.R.. Además, deberá pagar 5.840 euros de multa y tendrá una inhabilitación especial para el ejercicio de cargo o empleo público durante cinco años. "Solo existió una conducta malversadora. No se ha acreditado que obtuviera de ninguna de las conductas delictivas acreditadas beneficio propio alguno", cuentan los magistrados.
En cuanto al exdirector, la sentencia declara que "dispuso de un total de 32.566 euros para gastos en prostíbulos con cargo a fondos de la Faffe" entre los años 2004 y 2010. Los desembolsos que se han comprobado suman los 40 pagos. Según la Audiencia, "Esto es 40 veces que se apropió de fondos públicos, realizando varios pagos en una sola jornada, llegando hasta nueve pagos en un mismo día".
Por todo ello, se ha declarado a Villén como autor de un delito de malversación en concurso medial con un delito continuado de falsedad en documento oficial en concepto de inductor. El exmandatario deberá indemnizar a la Junta de Andalucía con la suma de 24.129 euros, que representa el resultado de restar al importe total de los gastos una devolución que hizo.
Gastos de 32.566 euros en prostíbulos
La Audiencia declara que, "prevaliéndose de su cargo", el acusado "llevó a cabo de manera continuada una disposición ilícita de los fondos de dicha entidad, utilizándolos para abonar los servicios que había solicitado en distintos locales de alterne de Sevilla y otras provincias andaluzas, usando para ello la tarjeta que en cada momento dispuso como director contra las cuentas de la fundación".
Además añade que utilizando tres tarjetas distintas, el condenado "dispuso de un total de 32.556 euros para gastos en prostíbulos con cargo a los fondos de la Faffe", y que "dispuso de dichos fondos públicos para su aprovechamiento y lucro personal, el actividades completamente ajenas a la función pública, sin que haya devuelto los gastos realizados a través de ninguna de sus cuentas bancarias ni tampoco en metálico a través de la Caja Central de la fundación".
En cuanto a los reembolsos, "solo devolvió parcialmente los gastos realizados los días 22 y 23 de marzo de 20210" en uno de los clubes. Además, la Audiencia indica que "para cuadrar la Caja, los acusados conocían que en el momento de practicarse la liquidación únicamente se precisaba que hubiesen gastos como los correspondientes a dietas o desplazamientos que absorbieran el importe de la devolución", añadiendo que "estos gastos, cuyas cantidades se ajustaban a la normativa de la Junta de Andalucía, podían ser reales, pero en muchos casos eran ficticios, pues la documentación justificativa de los mismos era prácticamente inexistente", y "eran anotados en las liquidaciones de la Caja con la referida finalidad de que se ajustasen al importe de los ingresos que suponía la devolución simulada".