Un hombre vecino de Arteixo (A Coruña) ha sido condenado por la Sección Primera de la Audiencia Provincial de A Coruña a diez años de cárcel por cometer un delito de abuso sexual a una menor de 13 años con acceso carnal.
Según ha informado el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), además de la pena de cárcel, se le ha condenado también a cinco años de libertad vigilada. Además, se le ha impuesto la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros de la víctima, de su domicilio, centro docente, o de cualquier lugar donde se encuentre, así como de comunicarse con ella por cualquier medio durante 12 años, según recoge Infromativos Telecinco.
Este tribunal ha considerado probado que el agresor, de 26 años, mantuvo relaciones sexuales con la menor, de 13 años, "pese a que tenía conocimiento de su edad y de que esa circunstancia condicionaba su consentimiento". Los hechos ocurrieron a finales de enero y principios de febrero de 2017 en el interior de un vehículo aparcado en la zona de Vilaboa (Culleredo).
Según la sentencia de los magistrados, desde ese momento el acusado mantuvo relaciones sexuales con la víctima "en diversas ocasiones", la última en agosto de 2017.
La versión de la víctima
La Audiencia ha especificado en la sentencia que la declaración de la menor es "convincente". Fue ella quien aportó "suficientes detalles sobre los hechos". Además, también afirma que la versión de la víctima está "corroborada por elementos objetivos, por prueba testifical de cargo y por las propias deficiencias y contradicciones de las declaraciones autoexculpatorias del acusado".
El tribunal también destaca que "pretender alegar que la declaración se produce como represalia por un amor despechado parece un argumento bastante débil porque no se observan trazas de esa emoción en la menor".
En este sentido, la sentencia también subraya que la víctima precisó "que en un primer momento se sintió deslumbrada porque alguien de la edad del acusado se fijase en ella, pero que esa confusión inicial se deshizo al comprobar el móvil sexual que le guiaba y porque la amenazaba para prolongar sus propósitos en el tiempo".