Jennifer Lee Wilson, una mujer de Indiana (Estados Unidos) ha sido condenada a seis años de prisión acusada de causar la muerte a su hijo adoptivo de diez años a finales de abril como un "castigo" tras huir a la casa de un vecino y aplastarlo bajo su cuerpo de 154 kilos.
La sentencia, emitida por el Tribunal Superior de Porter (Indiana) el pasado viernes 17 de enero, condena a la acusada a cinco años de prisión y uno de libertad condicional. La mujer se declaró culpable de homicidio imprudente en octubre, después de admitir que inmovilizó a su hijo adoptivo, Dakota Levi Stevens, contra el suelo durante cinco minutos, algo que le generó graves heridas como recoge CBS News.
La policía del condado señala que Dakota se escapó a la casa de un vecino en la zona y les dijo que sus padres adoptivos "le golpeaban y no le dejaba hablar con su asistente social". La vecina había alertado de que el niño corrió a su casa en abril y le había pedido que le adoptara porque sus padres le maltrataban.
"Se portaba mal"
La vecina asegura que el menor no mostraba entonces ninguna señal de lesiones y que la acusada se llevó a su hijo. Según los registros judiciales, la mujer aseguró ante la policía que su hijo se estaba "portando mal" y que se tiró al suelo diciendo que se quería marchar, momento que ella aprovechó para tumbarse sobre el menor y llamar a su asistente social.
Varios minutos después, la mujer le preguntó al menor si estaba listo para levantarse. Pero no encontró respuesta, por lo que primero le preguntó si estaba fingiendo y después comprobó que, en realidad, no respondía y que tenía los párpados pálidos, por lo que llamó a emergencias.
El niño, de tan solo 10 años, falleció en el hospital South Bend dos días después. La autopsia confirmó que sufría daños en órganos y tejidos blandos, hemorragia hepática y pulmonar y otras lesiones. La oficina forense del condado de St. Joseph determinó que la muerte fue causada por asfixia mecánica.