Daniel Sancho ha sido condenado en Tailandia por el asesinato y descuartizamiento del médico cirujano Edwin Arrieta a cadena perpetua. La justicia determina que hubo premeditación, pero excluye la habitual pena de muerte en estos casos al considerar que ha colaborado con la justicia en el caso. La familia también había descartado pedir dicha sentencia.
El hijo de Rodolfo Sancho, además, tendrá que pagar una indemnización de cuatro millones de baths (alrededor de 105.000 euros) a la familia del cirujano colombiano como compensación por el crimen.
La defensa de Daniel Sancho se ha abierto a presentar recursos contra la decisión judicial. Su abogada, Carmen Balfagón, ha reconocido que esta decisión "no nos la esperábamos", como ha declarado al programa 'Espejo Público' de Antena 3.
El abogado de la familia, Juango Ospina, se ha pronunciado en redes sociales y ha defendido que se "ha hecho justicia". Defiende la pena de cadena perpetua y que se haya decretado la premeditación en el crimen.
A pesar de que la Fiscalía pedía la pena de muerte, la familia había expresado en repetidas ocasiones que no estaba de acuerdo con este tipo de sentencia. En todo caso, si alguna de las partes muestra su disconformidad, caben dos vías de recurso, en el Tribunal de Apelaciones o el Supremo, que pueden extenderse un año.
El hijo de Rodolfo Sancho se encontraba encarcelado en la prisión tailandesa de Koh Samui desde agosto de 2023 como único acusado del caso.
El juicio contra Daniel Sancho se zanjó en mayo de 2024, un día antes de lo previsto, y siguiendo el Código Penal de Tailandia quedó visto para sentencia, fijada el 29 de agosto. En la representación legal de Sancho se ha encontrado el abogado Marcos García Montes, mientras que en la de Arriesta está Juango Ospina.
Sancho cometió el crimen con 29 años y ha cumplido 30 en prisión. El hijo de Rodolfo Sancho confesó el asesinato de Edwin Arrieta ante los agentes y colaboró con los investigadores en la reconstrucción del caso, que según indicó el oficial a finales de mayo de 2023, "se ha resuelto rápido".
La clave de la premeditación
En el juicio ha sido clave la posible premeditación o no de Sancho en el crimen. El Código Penal de Tailandia contempla la pena capital siempre que exista dicho agravante en los asesinato. En todo caso, no es habitual que se ejecute dicha pena, que se suele conmutar por cadena perpetua.
La policía tailandesa mantuvo en el inicio que el móvil se fundamentaba en una "aventura amorosa" que mantenían entonces Daniel Sancho, de 29 años, y el cirujano Edwin Arrieta, de 44, que se habían conocido un año antes a través de Instagram.
La policía descartó desde el inicio la posible implicación de terceras personas en el crimen, puesto que no se encontraron restos de ADN ni indicios en las cámaras de seguridad de las inmediaciones. Además, se registraron imágenes de Daniel Sancho comprando en supermercados de la isla útiles de limpieza, como guantes, bolsas de basura, cuchillos o una sierra antes de la muerte de Arrieta.
Daniel Sancho y Edwin Arrieta habían quedado durante el verano de 2023 en Koh Phangan, una isla muy turística conocida por albergar la fiesta de la luna llena, en la que una multitud de personas abarrotan las playas hasta el amanecer.
Durante la siguiente jornada, varios medios locales publicaron que un recolector de basura había encontrado en un vertedero de la isla una pelvis succionada e intestinos en una bolsa de fertilizantes. Después se hallaron más restos humanos en el mismo vertedero, entre ellos, parte de las extremidades inferiores de Arrieta. Además, otros restos fueron arrojados en el mar.