La pandemia del coronavirus está dejando un drama económico del que nos será muy difícil salir. En España, para ayudar a empresas y trabajadores, encontramos los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo regulado por el artículo 47 del Estatuto de los Trabajadores. Los afectos por los ERTE no computan como desempleados, pero tampoco perciben sus salarios de manera íntegra, lo que unido a problemas de bloqueos y retrasos de los cobros, está llevando a verdaderos dramas sociales.
Para paliar esta situación, se aprobó el Real Decreto ley 8/2020 de medidas urgentes extraordinarias para hacer frente al impacto económico y social del Covid-19 por el que se autorizó a las regiones a "ampliar partidas destinadas a garantizar ingresos suficientes a las familias, para asegurar la cobertura de sus necesidades básicas, ya sean estas de urgencia o de inserción" y también a adoptar "otras medidas que las comunidades autónomas, en colaboración con los servicios sociales de las entidades locales, consideren imprescindibles y urgentes para atender a personas especialmente vulnerables con motivo de esta crisis".
Con esto, todas las Comunidades Autónomas, incluyendo las dos ciudadanas autónomas, Ceuta y Melilla, han activado ayudas directas para trabajadores afectados por ERTE. Todas menos una región: la Comunidad de Madrid, que ademas tampoco las ha planificado para 2021. En el resto de España se han habilitado o anunciado complementos económicos para alcanzar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), adelanto de subvenciones de alquiler, priorización y planes específicos en formación e incluso avales bancarios ante momentos de impago o retrasos en el cobro del subsidio estatal.
Podría pensarse que la convocará de elecciones anticipadas en la región para el próximo 4 de mayo habrá paralizado este proceso, pero lo cierto que este tipo de ayudas no depende de plazos burocráticos sino de voluntad política que no ha habido por parte de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid.
Desde la Consejería de Empleo madrileña tratan de justificar las razones por las que no han activado ayudas a este tipo de trabajadores. "Los complementos a prestaciones como políticas pasivas corresponden al Gobierno de España. Las comunidades solo coordinan políticas activas (incentivos a la contratación, que sí se han lanzado, por valor de 19,4 millones de euros) aunque alguna región como Galicia lo intente. El Estado les puede recriminar", afirman desde la Puerta de Sol, olvidando por completo el texto del Real Decreto ley 8/2020.
En Madrid, en el último informe de coyuntura económica mensual que publica la región correspondiente a enero, se reconoce el continuo incremento de trabajadoras y trabajadores afectados por ERTE. Ante esta situación, la Comunidad ha decidido derivar sus impulsos económicos de forma indirecta a planes de mantenimiento del empleo y fomento de la contratación en empresas, aunque sin especificar bonificaciones para incorporar o mejorar las condiciones de estos trabajadores. Madrid, por tanto, es la única región española que deja en manos privadas la decisión de mejorar la situación de las personas afectadas por los expedientes de regulación temporal empleo.
Sin ayudas a hostelería y pymes
En otro aspecto en el que la Comunidad de Madrid se sitúa a la cabeza de España es en no ofrecer ayudas a hostelería y a pymes, sectores especialmente golpeados durante la pandemia del coronavirus . La convocatoria de elecciones ha interrumpido la legislatura sin haber aprobado ni tan siquiera los Presupuestos Generales, a lo que se ha referido el exviepresidente Ignacio Aguado durante una intervención en 'Las cosas claras', programa de TVE. "Llevo negociando con el PP 5 años consecutivos. He negociado personalmente cuatro presupuestos con el PP. Tres con Cristina Cifuentes, uno con Ángel Garrido y este último no ha sido posible. Habrá que buscar quién es el culpable, desde luego Ciudadanos no, porque cuando ha sido posible, lo hemos hecho", ha lamentado.
Especialmente reveladoras han sido sus palabras sobre la postura del Partido Popular en cuanto a las ayudas directas a la hostería y al pequeño y medio comercio. "Llevaba cuatro meses negociand, porque el PP no quería dar un solo euro en ayudas directas", ha explicado. "Cada euro que hemos conseguido, se lo hemos arrancado de su voluntad", ha añadido, lanzando un dardo a la presidenta regional: "Decía la señora Ayuso que defendía la hostería, pero mentía, porque cuando había que hablar de dinero, no quería entregar ni un solo euro en ayudas directas".