El último informe de la Cámara de Cuentas, el organismo responsable de fiscalizar los fondos de las Administraciones públicas en Madrid, ha desmontado la política sanitaria impulsada tras el modelo Alzira: privatizar la gestión de los hospitales públicos ayuda a ahorrar dinero. De hecho, en algunos tratamientos o intervenciones puede llegar a costar más de seis veces que en los centros públicos.
Este informe, que analiza el coste sanitario entre 2011 y 2015, denuncia que los pagos realizados a la Fundación Jiménez Díaz de Madrid (con la que se mantiene un acuerdo de colaboración público-privada) cuentan con una diferencia de coste especialmente sensible que los materializados, por ejemplo, en el Hospital Clínico (de gestión pública y situado enfrente).
El informe cifra ese exceso de coste en "desviaciones de hasta el 743%", donde destacan las cirugías ambulatorias, es decir, las operaciones más frecuentes que no requieren ingreso (intervenciones menores); incluso, en los costes de hospitalización por patologías en la mayoría de los casos el coste es mayor en lo privado.
La privatización sanitaria no es más eficiente en el gasto público
Estos datos provisionales recogidos por el anteproyecto del órgano fiscalizador sobre el gasto sanitario y farmacéutico entre 2011 y 2015, pone como ejemplo del sobrecoste las siguientes cirugías ambulatorias: una biopsia de mama pasa de costar 1000€ a 3000€, una operación de fimosis de 1.000€ a 5.000€, una intervención de ojo de unos 500€ a 3.700€, operaciones de varices o extraer un lunar o un lipoma cuestan unos 1.000€ de media en los hospitales públicos mientras en la Fundación unos 3.500€. Por último, en las operaciones de pie (juanetes o dedos martillo) cuestan tres veces más con este concierto. El coste en muchos casos llega a ser seis o siete veces mayor que en el hospital público.
"De los 25 GRD (Grupos Relacionados por el Diagnóstico, método de los hospitales para medir su actividad) más frecuentes en Cirugía Mayor Ambulatoria, se verifica que en todos los casos la tarifa de la fundación es muy superior a la media y a la de otros hospitales", explica el órgano fiscalizador. Estas normalmente proceden de otros hospitales para reducir las listas de espera.
En los costes relacionados con hospitalización por patologías, en el análisis realizado por el SERMAS (Servicio Madrileño de Salud), sacan una conclusión muy parecida: "de los 25 GRD más frecuentes en hospitalización, únicamente en cinco procesos la tarifa de la fundación es inferior". Tratar una insuficiencia cardiaca o un ictus puede llegar a costar el doble.
La Comunidad de Madrid paga más por los tratamiento en hospitales privatizados
Estos excesos de gasto que recoge el texto provisional salen de comparar el coste de algunas operaciones ambulatorias y de la hospitalización en la Fundación Jiménez Díaz con otros centros públicos con una cartera de servicios similar.
La Cámara de Cuentas focaliza parte del problema en las "cláusulas adicionales", que comprenden los pagos que se hacen a la Fundación Jiménez Díaz, al margen de la actividad básica en concepto de facturación extra por la actividad complementaria, la lista de espera y la libre elección. Es decir, pacientes de fuera de su zona de acción que acuden libremente a la Fundación o son derivados de otros centros para aligerar las listas de espera. Esta cifra ha aumentado desde los 7,6 millones a los 58 millones entre 2011 y 2015.
El propio organismo fiscalizador explica que, de haberse aplicado las tarifas del precio público, los ahorros anuales habrían ascendido a más de 55 millones de euros en 2014 y 61 millones en 2015. Incluso va más allá, porque les resulta sorprendente que mientras "los gastos reales de la mayoría de hospitales públicos del grupo 3" (al que pertenece la Fundación) disminuyeron "en torno al 10%" entre 2010 y 2014; "los de la Fundación Jiménez Díaz se incrementaron un 23%"
La Consejería de Sanidad por el momento no quiere entrar a valorar el informe
La Cámara de Cuentas recala la responsabilidad en la Comunidad de Madrid a "renegociar el convenio singular marco en aras de adecuar el coste de los servicios sanitarios al precio público y así reducir el gasto de la actividad sanitaria sustitutoria" y añade que ese reajuste depende "la sostenibilidad del sistema sanitario madrileño" porque reduciría un "coste considerablemente más elevado".
La Consejería de Sanidad de Madrid ya ha presentado alegaciones al informe, un texto aún no definitivo, según destaca El Diario. En él también refleja que en 2012 la propia Consejería de Sanidad detectó que era posible ahorrar hasta 37 millones de euros anuales de más de 312 si se renegociaba el convenio y planteó varios escenarios: con "financiación capitativa (lo que se paga por paciente)" o teniendo en cuenta "las tarifas medias (precios públicos)". En este segundo caso, el ahorro ascendería a 58 millones, según recoge el órgano fiscalizador. Sin embargo, por el momento la Consejería no quiere entrar a valorar el informe ya que no es el "definitivo".
En cinco años la Comunidad de Madrid ha pagado a la Fundación Jiménez Díaz más de 1.721 millones de euros, a razón de una media de 350 millones al año, según los datos compilados por el organismo fiscalizador.