La Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha decidido dar carpetazo a la investigación abierta sobre las posibles irregularidades en la obtención de la Licenciatura de Derecho por parte del ahora presidente del Partido Popular, Pablo Casado.
A través de un comunicado, la institución ha señalado que no va a iniciar ningún expediente relacionado con este asunto pese a quedar constatadas las presiones que llevaron a Casado a aprobar la mitad de la carrera en apenas cuatro meses, justo al conseguir su primer acta de diputado como parlamentario en la Asamblea de Madrid.
Un profesor de Pablo Casado denunció ante la inspección de la UCM que recibió presiones para dispensar trato de favor al político en la licenciatura que estaba cursando durante el 205 y el 2007. Aprobando doce asignaturas anuales en cuatro meses, la Complutense llamó al centro Carcenal Cisneros, donde por el entonces presidente de Nuevas Generaciones del PP aprobó Derecho en tiempo récord, a dotarse de mecanismos para "detectar" este tipo de "situaciones en las que el número de asignaturas aprobadas por un estudiante sea significativamente superior al ordinario", recoge El Mundo.
Se cierra así el expediente a pesar de que el entonces director del centro, Alberto Pérez de Vargas, admitió haber recibido "muestras de interés" señalando directamente a Esperanza Aguirre, por aquel entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, muy interesada en que Casado terminara "de una vez la carrera"
Presiones y trato de favor
Varios docentes que aprobaron las asignaturas a Pablo Casado han declarado ante la Complutense, aunque no todos ellos, ya que algunos ya están desvinculados de la universidad, otros han fallecidos y algunos se han negado a hacerlo. La resolución emitida por la institución asegura que la mayoría de los profesores han atestiguado no haber recibido presiones, aunque queda reflejado el testimonio del profesor que asegura que Pérez de Vargas le dio indicaciones para dar un trato de favor a Casado.
Este profesor fue el único que suspendió al ahora presidente del PP. Ha asegurado a la inspección que las presiones fueron ejercidas por el director del Cisneros y que se le llegó a pedir que aprobara al alumno pese a que éste merecía un suspenso. Su testimonio ha ido más allá afirmando que la mayor parte de los profesores estaban "encantados" con facilitarle el título a Casado al que ya definían como "sucesor de Rajoy".
"Conviene recordar que, dado el tiempo transcurrido, los profesores no tienen obligación de conservar ninguna prueba documental, por lo que las actas académicas son el único documento constatable", dicta la Complutense, cerrando así la investigación.