Los padres ya pueden amamantar también a sus hijos. Eso es lo que propone una estudiante británica, que ha ideado un complejo hormonal que permitirá a los barones segregar leche para colaborar en la alimentación de los recién nacidos.
La responsable de este desarrollo es la joven estudiante Marie-Claire Springham, tal y como relata el diario The Star. Este kit consta de un compuesto hormonal basado en la progesterona que el hombre deberá tomar en las últimas semanas de gestación del bebé para que sus pezones comiencen a segregar leche en el momento del parto.
Esta hormona se produce de manera natural en mujeres, pero no en los hombres. Por otro lado, los hombres también deberían consumir domperidona, que se incluye en el kit y que se encarga generar prolactina, la responsable de aumentar las segregaciones (precisamente, se usa para las mujeres que cuentan con este tipo de problemas tras el embarazo).
El compuesto ya tiene nombre: Chestfeeding for Dads. Además, no faltarán detalles. Por ello, habrá una bomba y un chaleco de comprensión para facilitar y garantizar que el alimento llega en todo momento al recién nacido.
El producto ya ha recibido el Meaning Centre Design Award porque "desafía los significados fundamentales de ser hombre y mujer, padre y madre o padre e hijo", destacó la presidenta del certamen, Julie Jenson Bennett.
Jenson considera que este kit llega en el mejor momento, ya que "cada vez consumimos más hormonas, medicamentos y tecnología para cambiar nuestros condicionantes vitales", por lo que su uso ya se encuentra normalizado. A pesar de ello, critica que este tipo de lanzamientos "van al corazón de nuestros tabúes", por lo que opina que habrá que dejar tiempo hasta que su uso se generalice.
"Hemos roto los roles de género"
Por su parte, la responsable de este invento, Marie-Claire Springham, ha destacado que este desarrollo "tiene el poder de dar la vuelta a todo lo que creemos sobre la crianza de los hijos, rompiendo los roles de género y sociales".
Springham dice que es consciente de que habrá polémica, pero cree que el debate será constructivo: "Espero que las discusiones planteadas por este proyecto sean llevadas más lejos e inspiren aún más la innovación y el progreso".
El premio que ha recibido esta joven forma parte de un grupo de seis proyectos diseñados por otros emprendedores independientes. Entre ellos, el Jelly Drop, un dulce diseñado para evitar la deshidratación crónica en personas con demencia o Grohe Sense & Sense Guard, un dispositivo que lucha contra la inundación de viviendas que se produce tras los desastres medioambientales.