Garantizar la seguridad de nuestros dispositivos es fundamental, pero no siempre conseguimos evitar el acceso de intrusos que pueden consultar nuestra información más privada. Los hackers cada vez utilizan formas más sofisticadas a la hora de sortear los sistemas de seguridad de los teléfonos móviles, por lo que cabe tener cuidado si queremos preservar nuestra privacidad.
Por ello, si queremos tener cuidado, cabe tener en cuenta una serie de signos que pueden aparecer de manera abrupta o paulatina en nuestro teléfono e indicar que estamos siendo víctimas de un hackeo por parte de algún ciberdelincuente.
¿Cómo puedo saber si están espiando mi teléfono móvil?
Entre los aspectos a tener en cuenta, uno de los importantes es que las aplicaciones empiecen a cerrarse solas. Si esto sucede, nunca es buena señal. No siempre sucede por este motivo, pero sí que cabe tenerlo en cuenta.
También es posible que veamos cómo nuestro dispositivo empieza a funcionar cada vez más lento. Si el procesador no está siendo más utilizado de lo normal, es posible que sea porque alguien ha accedido a él sin permiso.
Si la batería suele agotarse rápido, de repente, también es mala señal. Si bien es cierto que las baterías se deterioran y cada vez duran menos tiempo, si esa durabilidad es irregular, puede ser señal de que alguien está espiando tu teléfono. Si compruebas que en ocasiones funciona normal y en otras se agota rápido, deberías consultar con algún experto para que pueda asesorarte.
Otro punto al que deberías prestar atención son los inicios de sesión extraños. Si recibes mensajes, notificaciones o correos electrónicos donde te avisan de que alguien ha iniciado sesión en tus cuentas, rastrea hasta conocer qué sucede. Es la prueba más evidente de que estás sufriendo un espionaje.
En cuanto a las interferencias, debemos consultar con un experto si experimentamos problemas con las llamadas. Se trata de ruidos extraños, algo que no representa una buena señal. No tiene por qué ser un hackeo, aunque ofrece una pista sobre una posible intervención de nuestros dispositivos, por lo que conviene estar atento.
Por último, otro punto a comprobar se encuentra en los datos. Si vemos que suelen gastarse antes de tiempo, sobre todo con un consumo considerable que aumenta en un plazo demasiado rápido (de un mes para el siguiente), conviene consultar. Posiblemente, están hackeando nuestro dispositivo. Pero, en este caso, hay que ser prudentes: si vemos que se han terminado los datos uno o dos días antes, quizás es una app que está tirando demasiado de internet. Por ello, conviene consultar primero nuestro dispositivo y ver si estamos realizando un gasto normal.